Carlyle engorda su cartera de moda y compra el ‘pure player’ británico End

Carlyle continúa apostando por la moda. La gestora estadounidense de fondos de inversión The Carlyle Group ha acordado la compra del pure player británico End, especializado en moda deportiva y streetwear de lujo. El fondo vuelve así a apostar por la moda, tras entrar en Supreme y la china Ellassay y diez años después de salir de Moncler, uno de sus mayores éxitos en el sector.

Según el acuerdo de adquisición, los dos fundadores de End, Christiaan Ashworth y John Parker, mantendrán una participación minoritaria en la compañía y seguirán siendo co-consejeros delegados de la empresa. La transacción se cerrará el 1 de abril. Index Ventures, que actualmente tiene una participación minoritaria, saldrá de la compañía.

The Carlyle Group apoyará la expansión de End, aprovechando su experiencia en el sector del consumo, tanto en el Reino Unido como a escala internacional. La operación se ha realizado a través de Carlyle Europe Partners, que invierte en oportunidades de negocio en el mercado europeo y Carlyle Asia Partners, centrado en adquisiciones e inversiones estratégicas en una variedad de sectores en la región de Asia Pacífico.

“Carlyle será fundamental para la expansión internacional de la compañía británica”, según sus fundadores

“La experiencia de Carlyle en el sector del lujo y la moda urbana respaldarán la estrategia de crecimiento sostenible a largo plazo de End; el conocimiento de la industria de Carlyle y su plataforma global serán fundamentales para la expansión internacional de la compañía”, han indicado Christiaan Ashworth y John Parker, cofundadores y consejeros delegados, en una nota de prensa.

Fundada en 2005 y con sede en Newcastle, Reino Unido, End es un pure player multimarca especializado en moda contemporánea y de lujo. Dispone de una oferta omnicanal que incluye plataforma online y tiendas físicas.  La compañía emplea a más de 650 personas en Reino Unido y vende a más de 100 países en todo el mundo. En el ejercicio finalizado en marzo de 2020, facturó 170 millones de libras (197 millones de euros), de los cuales un 65% fueron fuera del Reino Unido.

Por su parte, el fondo de inversión The Carlyle Group tiene más de 160.000 millones de dólares en activos bajo gestión a través de 287 vehículos de inversión y cuenta con más de una treintena de oficinas en todo el mundo.