Empresa

Caramelo despide a 24 trabajadores por los destrozos en su fábrica

17 jun 2009 - 00:00

La dirección de Caramelo ha despedido a los 24 trabajadores que ha identificado como responsables de los destrozos registrados la semana pasada en su fábrica de A Coruña. Los incidentes, que afectaron al género y al mobiliario de la instalación, tuvieron lugar durante las protestas laborales contra un expediente de regulación de empleo (ERE) para recortar la plantilla en 237 personas. Los sindicatos de Caramelo no condenaron con claridad los incidentes, que atribuyeron a la "tensión" existente en la plantilla. Se da la circunstancia, además, de que seis de los empleados implicados en los destrozos son miembros del comité de empresa de la compañía. Actualmente se cuentran en suspensión cautelar de empleo. Los representantes sindicales anunciaron que recurrirán judicialmente las medidas disciplinarias llevadas a cabo por Caramelo.La empresa había calificado como "serios e importantes" los desperfectos generados en la fábrica y anunció una denuncia contra sus causantes. Por su parte, desde el comité de empresa se indicó ayer que los 24 despidos son una muestra de la "desesperación" de la compañía, a la que acusan de "provocación" a los trabajadores con el anuncio de la solicitud de concurso de acreedores de la semana pasada. Las negociaciones entre la dirección de Caramelo y los sindicatos deberían reanudarse en los próximos días, gracias a la mediación de la Xunta de Galicia. Por el momento, Caremelo ha iniciado los trámites para presentar concurso de acreedores, ante la imposibilida de llevar a cabo su plan de viabilidad tras la desestimación del ERE por parte de la Administración que dirige Alberto Núñez Feijóo. El expediente se inscribe en la estrategia global de Caramelo, controlada por el empresario Manuel Jové a través de su sociedad Inveravante. El objetivo del plan es reducir costes en 22 millones de euros para sacar a la compañía de los números rojos. Caramelo, que controla las marcas Caramelo, Caramelo Jeans y Antonio Pernas, registró en 2008 unas pérdidas de 29,9 millones.