Caramelo avanza en la negociación tras esquivar una huelga de la plantilla

Lento avance en las negociaciones en Caramelo. La dirección de la compañía y los trabajadores de la empresa prosiguen esta semana una intensa agenda negociadora en la que los movimientos de una y otra parte no pasan de tímidos gestos. Ayer, la empresa propuso a los sindicatos elevar en 100.000 euros el gasto total a repartir por las indemnizaciones vinculadas al expediente de regulación de empleo (ERE) para despedir a 237 trabajadores. Esta cantidad, cuyo reparto recaería en el comité de empresa, se suma a una oferta de 37 días de salario por año trabajado, con un límite de 37 mensualidades. Los sindicatos marcan su mínimo en 45 días y un límite de 42 meses.Por parte de los trabajadores, que rechazaron en una asamblea la oferta de Caramelo, el movimiento tomado fue el aplazamiento de una huelga prevista para hoy y que, según la empresa, habría dinamitado de nuevo el proceso negociador. Hoy, el comité de empresa de la compañía y la dirección del grupo controlado por el empresario Manuel Jove a través del hólding inversor Inveravante mantendrán una nueva reunión negociadora. El proceso cuenta con la mediación de la Xunta de Galicia, que participa en Caramelo con un 7,5% del capital. En los últimos días, la dirección de Caramelo planteó públicamente una advertencia a sus trabajadores al señalar que sin el ERE, que forma parte de un plan industrial global para la compañía, la empresa se vería abodaca al concurso de acreedores, del que ya ha iniciado procesos preliminares. Por parte del comité de empresa, en el que tiene una representación mayoritaria el sindicato nacionalista Confederación Intersindical Galega (CIG), se plantea como imprescindible abordar durante las negociaciones el futuro de 25 trabajadores expedientados por la empresa por los destrozos registrados en junio en la fábrica a A Coruña, en el transcurso de las protestas laborales.