Empresa

El calzado de Callaghan acelera en China con la apertura de cien tiendas en cinco años

Silvia Riera

23 abr 2012 - 05:00

Cien tiendas. Es el objetivo de Callaghan en el mercado chino en un plazo de cinco años. Su director general, Basilio García, ha explicado a Modaes.es que sus planes de expansión en el gigante asiático pasan por llegar a 2012 con veinte establecimientos y alcanzar los cien en 2017. Por ahora, la marca riojana de calzado, propiedad de Grupo Hergar, cuenta con doce tiendas en China, en las principales ciudades del país y en algunas del interior de más de cuatro millones de habitantes.

 

Callaghan acaba de abrir este mes su duodécimo establecimiento en China y prevé llegar a los cien en los próximos cinco años. “Es más difícil abrir cincuenta tiendas que 300”, asegura García. “Cuando funciona y te conocen, es mucho más fácil crecer”, agrega. Por el momento, Callaghan tan sólo obtiene el 5% de su volumen de negocio en China, pero su director general espera que esta cifra vaya multiplicándose cada año.

 

La marca española de calzado apuesta desde hace años por la internacionalización y está presente en una treintena de países. En Asia, también distribuye en Corea del Sur. Y en Europa, su principal mercado es Italia, que cubre a través de una red de establecimientos multimarca. 

 

Hergar acaba de abrir su primera tienda Callaghan en la localidad italiana de Alba, cerca de Turín, en régimen de franquicia. Es el primer paso de la empresa en el canal monomarca, que el grupo estudiará para observar su posible desarrollo.

 

Por otro lado, Callaghan abrió tienda online hace seis meses. Por el momento sólo distribuye en España, pero planea expandirla a toda Europa antes del verano. “Su nivel de facturación no es comparable al del canal tradicional -asegura García- pero sí es importante para la fidelización”.

 

García considera imprescindible crecer a nivel internacional para sobrevivir. “La empresa que no crece, está muerta”, afirma. A pesar de ello, confiesa que abrirse camino en el extranjero es “extremadamente duro”. 

 

China, un mercado difícil 

Basilio García acababa de regresar de un viaje a Estados Unidos. “Estamos haciendo contactos en Estados Unidos, pero no es uno de nuestros mercados prioritarios ahora”. El que sí es prioritario para Callaghan es China y lo es desde hace seis años, cuando empezaron a interesarse en él como mercado de consumo y no sólo como proveedor.

 

García explica que el proceso de aterrizaje y crecimiento en el país asiático ha sido largo y complicado. La empresa empezó trabajando con un socio local, pero al no avanzar a la velocidad esperada, optó por continuar sola durante dos años. Ahora, la compañía trabaja con un segundo socio local, que está llevando a cabo el nuevo proceso de expansión en China.

 

El director general de Callaghan asegura que crecer solo en China es muy complicado, sobre todo para una empresa que no es grande. “China es diferente a España y a Europa. No hay establecimientos multimarca y el comercio se concentra en centros comerciales. Esto obliga a entrar con tiendas propias”, apunta.

 

Además, la marca riojana se está posicionando en China en un segmento mucho más alto que en España. Según explica su director general, un par de zapatos Callaghan en China cuestan entre un 50% y 100% más que en el mercado español. El directivo apunta que, “a diferencia de España, en China no están en crisis y les preocupa más la forma de vestir y el estatus”. Y añade que a los ciudadanos chinos “la calidad no les importa cuando producen, pero cuando compran la quieren exquisita”.

 

El principal valor de Callaghan es la tecnología de adaptación al pie. Basilio García considera que es fundamental saber explicarla y que la persona la perciba desde el primer momento en que se calza los zapatos. “Si no está bien explicado y no se nota, la tecnología no es válida. El I+D que no se explica bien, no funciona en el mercado”, afirma.

 

En 2011, el Grupo Hergar, que además de Callaghan es propietario de la marca de calzado infantil Gorila, facturó 34 millones de euros, cifra que espera mantener este año.  García prevé un ejercicio complejo, no tanto por la crisis, sino por la climatología. Por otro lado, asegura que cada vez es más difícil vender la colección. “Antes lo vendías todo en el momento en que salías a vender. Ahora es un trabajo de día a día, como la Liga, que tiene que ganarse semana tras semana”, asegura.

 

Basilio García forma parte de la segunda generación de esta empresa familiar, que en 1968 fundó su padre. Es el mayor de cuatro hermanos, todos ellos implicados en la empresa, que mantiene su sede en Arnedo (La Rioja) y que da empleo a 120 trabajadores. La mayor parte de su producción se realiza en España y tan sólo algunos modelos y parte de la colección de Gorila, se produce en el extranjero.