Buenos Liberto da el salto al comercio a pie de calle y enfunda sus vaqueros en ‘pop-up stores’

Buenos Liberto da un paso más en su estrategia de expansión. La empresa catalana Ultra Cinco, propietaria de la licencia de explotación de la marca para el mercado español, impulsará la comercialización de la próxima colección otoño-invierno de la marca con la puesta en marcha de pop-up stores, según ha explicado su director general, Laurent Layani, a Modaes.es.

La marca, que se relanzó en marzo, inició su distribución sólo en Internet, a través de su propia página de web y de operadores especializados, como Privalia o Amazon. Ahora, el segundo paso de la enseña es dar el salto al comercio a pie de calle con la puesta en marcha de establecimientos efímeros en las ciudades de Madrid y Barcelona.

Las aperturas de estas pop-up stores están previstas para este otoño, aunque todavía falta por concretar las fechas. Ultra Cinco también negocia otra apertura en Bilbao. Este verano, Buenos Liberto ya puso en marcha su primera pop-up store en Sabadell, coincidiendo con el Campeonato de España Absoluto de Doma Clásica.

“Por el momento, estamos en una fase de pruebas”, ha explicado Layani. “Si estas tiendas funcionan, abriremos más en otras ciudades”, ha añadido el empresario. Layani ha asegurado también que estiman empezar a distribuir sus colecciones en establecimientos multimarca a partir de la próxima temporada de otoño-invierno 2015-2016.

Buenos Liberto comercializa por ahora sólo su línea para hombre, aunque contempla el lanzamiento de la de mujer para finales de la actual temporada de inverno o principios de la de primavera. En este sentido, Layani ha subrayado que la primera temporada ha cubierto con las expectativas.

Buenos Liberto nació en Francia en los setenta. En 1984 entró en España, aunque el éxito no le llegó hasta la década de los noventa. La marca, que se caracteriza por el logotipo de un indio, fue una de las primeras en introducir el lavado de piedra en las prendas, con el que se consigue un efecto desgastado.

La historia de la enseña se truncó en 2006 con el cierre de su fábrica en Vidreres, que sumaba tres años de pérdidas y tres expedientes de regulación de empleo. La compañía francesa se estableció en esta localidad gerundense en 1984 de la mano de uno de los fundadores de Buenos Liberto. La fábrica de Vidreres era el único centro de producción de la enseña.