Brownie se profesionaliza y proyecta una inversión de 4 millones para duplicar su tamaño en dos años

Brownie acelera. La compañía, especializada en moda joven femenina y basada en Barcelona, pone en marcha un plan estratégico con la mirada puesta en convertirse en una empresa de 26 millones de euros de facturación y 35 tiendas en 2017. Controlada por capital familiar, Brownie emprende un proceso de profesionalización tras el fichaje de Albert Puyol como consejero delegado y ultima la introducción de un nuevo sistema logístico para hacer frente a su desarrollo.

La empresa inició su andadura hace diez años de la mano de los empresarios Mercedes Ortega y Juan Morera, que contaban con experiencia previa en el sector. Hace dos años, la compañía inició su profesionalización con ejecutivos externos. Aunque ambos fundadores siguen vinculados con la compañía, la gestión diaria recae en un comité de dirección formado por seis miembros.

Este equipo será el encargado de liderar el nuevo plan estratégico trazado por la empresa. Con una red de tiendas formada actualmente con trece establecimientos propios, Brownie ha cerrado el ejercicio 2015 con crecimiento del 50%, desde los nueve millones de euros de 2014.

Plan de aperturas e inversión

La compañía se ha marcado el objetivo de repetir en 2016 el ritmo de crecimiento de 2015. Para lograrlo, el grupo no sólo confía en la evolución de sus tiendas actuales, sino que proyecta la apertura de cinco establecimientos entre España y Portugal, según Albert Puyol.

La empresa planea la apertura de 13 tiendas en dos años y ha pactado ya su entrada en El Corte Inglés

A estos puntos de venta habrá que sumar los espacios de venta en El Corte Inglés, donde la marca iniciará su desarrollo en marzo con cuatro corners, ubicados en Madrid (en los centros de Preciados y Castellana), Murcia y Málaga.

El desarrollo del ejercicio 2016 supondrá una inversión de dos millones de euros, que se financiará con fondos propios y deuda. “Hasta ahora, prácticamente no habíamos recurrido a la deuda, pero ya hemos pactado la financiación bancaria que requerimos para el futuro”, sostiene Peter Nijssen, director financiero de la empresa, que añade que la marca no se plantea, de momento, la apertura de su capital.

Los planes de Brownie para 2017 supondrán un desembolso de dos millones de euros más, con la apertura de ocho establecimientos en España y Portugal. “A finales de 2017 estaremos preparados para saltar a Europa”, sostiene Puyol.  El plan estratégico contempla que Brownie cerrará 2017 con una red de 35 puntos de ventas y una facturación de 26 millones de euros, además de una plantilla de cien empleados.

Brownie finalizó 2015 con un crecimiento del 50%, superando los 13 millones de euros de facturación

Así, en 2017 Brownie habrá alcanzado prácticamente su tamaño “ideal” en España. “Brownie no es una marca que pueda tener mucha exposición, porque perderíamos parte de nuestros valores”, señala Puyol, que calcula que en España se abrirán un máximo de 35 tiendas.

Estructura: logística y personal

Brownie distribuyó en 2015 un total de 250.000 prendas, cuya producción se realiza en un 80% en España y en un 20% entre India y China. “La fabricación en España nos da velocidad y nos permite realizar reposiciones diarias a tienda, pero sabemos que a medida que crezcamos la operativa se complicará”, afirma Puyol, que ha pasado por compañías como Women’secret (Cortefiel), Loewe o Textil Lonia a lo largo de su trayectoria.

Actualmente, la empresa gestiona su logística desde su propia sede, ubicada en el centro de Barcelona. Para dar respuesta al crecimiento previsto, la compañía ultima la externalización de su logística y la contratación de una empresa especializada.

La marca compite directamente con Brandy Melville y Double Agent pero quiere alejarse de la imagen californiana

“Los próximos dos años los dedicaremos a hacer músculo, tanto económico como de personas, para estar listos para el crecimiento en Europa”, explica Puyol. Tras la creación del comité de dirección, en 2016 la empresa se centrará en reforzar su equipo de diseño y de compras, para ampliar en una segunda fase el de retail. La plantilla de Brownie está formada actualmente por 51 personas, dieciocho de ellas en central.

La empresa cuenta con una filial en Portugal, que se ha puesto en marcha con motivo del inicio de la expansión de la marca en el país. La intención de la compañía pasa por dotar de estructura a esta filial en un plazo de 18 meses para apoyar a los seis establecimientos que la marca calcula óptimos para el mercado portugués. 

Lejos del estereotipo del estilo californiano

Fundada en 2006, Brownie compite directamente con marcas juveniles como la italiana Brandy Melville o la española Double Agent, ambas de inspiración californiana. Con un precio medio de cuarenta euros, su público comenzó estando formado por jóvenes de entre 13 y 17 años (igual que Brandy Melville o Double Agent), pero la marca ha ampliado su abanico acercándose a un cliente más adulto.

La compañía de capital familiar financiará su desarrollo combinando fondos propios y deuda

Brownie quiere alejarse del estilo californiano tan en boga actualmente y rechaza trabajar con una tendencia pasajera. “Somos mediterráneos, que no californianos”, sostiene Lucas Morera, hijo de los fundadores y ejecutivo de la compañía.

“El producto ha ido evolucionando en estos diez años: el producto es importante, pero lo es más la marca”, añade. “No tenemos miedo a pasar de moda, no somos algo pasajero”, concluye.