Bonnet à Pompon, próximos pasos: abre corners en El Corte Inglés y se refuerza online en el extranjero para crecer un 25%

Bonnet à Pompon se prepara para la remontada al calor del online. La compañía española de moda infantil, que desde 2017 está controlada por el fondo catarí Euroirada, propiedad de M. J. Al -Thani Jassim, prevé acelerar su expansión internacional de la mano de nuevos marketplaces y cadenas de grandes almacenes en México y Londres. En España, la empresa desembarcará con corners en dos nuevos centros de El Corte Inglés, en la zona norte del país.

El objetivo de la compañía, que opera en un sector particularmente golpeado por la pandemia, es volver a la senda del crecimiento y superar los niveles de 2019. “Empezamos el nuevo año con optimismo, pero esperábamos una mayor recuperación de la que se está produciendo”, explica Genoveva Escalada, directora general de Bonnet à Pompon desde el año pasado. “Tenemos unas previsiones de crecimiento de alrededor del 25% para el conjunto del año, pero en el primer trimestre aún no se están cumpliendo las expectativas”, continúa la ejecutiva.

Esta necesidad de acelerar la recuperación ha llevado a la empresa a agilizar sus objetivos y la estrategia para este año. Bonnet à Pompon planea usar el canal online como palanca de crecimiento, reforzando y afianzando su plataforma propia de ecommerce y entrando en nuevos marketplaces internacionales para abrirse a nuevos mercados. “En Europa estamos moviendo proyectos, sobre todo en el norte”, subraya Escalada, añadiendo además que la compañía también ha iniciado conversaciones para entrar en Asia y está en negociaciones con otra plataforma canadiense.

En la actualidad, la plataforma de ecommerce de Bonnet à Pompon copa alrededor del 30% de la facturación. “Tiene más peso que antes de la pandemia, pero, con todo, continúa siendo inferior al de las tiendas”, matiza la directiva.

Bonnet à Pompon planea crecer en el extranjero de la mano de ‘marketplaces’ en Europa y Asia y grandes almacenes en México

La empresa también está en conversaciones con dos cadenas de grandes almacenes para afianzarse en México, donde está presente con una franquicia; y en Reino Unido, un mercado del que salió el año pasado tras cerrar su tienda en Londres. Una de las razones que empujaron a la compañía cerrar el establecimiento, además de las consecuencias derivadas de la crisis del Covid-19 (que han impedido la actividad regular del comercio no esencial hasta este mismo abril), fue la situación del Brexit. “Londres ya venía arrastrando una situación un poco ambigua, y al final fue uno de los puntos de venta que más sufrió”, apunta Escalada.

Ahora, Bonnet à Pompon quiere volver a intentarlo en el mercado británico de la mano de un partner local, con el que ya estaba en conversaciones antes del estallido del Covid-19. “Tenemos un cliente en Londres que nos sigue reclamando y que nos sigue comprando a través de la web, y nos parece una pena que, con todo este avance y afianzamiento, lo perdamos por la situación”, reflexiona la directora general de la empresa. “Somos una marca muy atractiva para el turismo en general”, sentencia la ejecutiva.

Londres no fue la única ciudad en la que la compañía echó el cierre a una tienda. En Zaragoza, la empresa también deshizo posiciones para adaptarse al nuevo contexto pandémico y minimizar los daños provocados por las restricciones. “Hemos intentado ajustarlo todo al máximo”, asegura Escalada. En la actualidad, el mercado internacional copa en torno al 12% de las ventas totales de la empresa, que cuenta con una red de seis puntos de venta en España, cuatro corners en El Corte Inglés y dos franquicias en Arabia Saudí y en México.

A finales del año pasado, Bonnet à Pompon empezó a implementar una estrategia para “dar un giro a la marca”, según la ejecutiva. La compañía trasladó su flagship store de la calle Lagasca para establecerse en Alaya. “Con el nuevo espacio, promovemos un cambio de imagen y más cercanía con el cliente”, continúa la directiva, señalando además que el nuevo espacio “nos permite transmitir mejor nuestro mensaje”. “El cambio ha sido muy positivo, es un punto donde hay más afluencia y estamos muy contentos con el resultado”, concluye Escalada.

La compañía ampliará su línea de producto este año y desembarcará con dos corners en nuevos centros de El Corte Inglés

La empresa prevé abrir dos nuevos corners en El Corte Inglés, en la zona del norte de España, a partir del segundo trimestre. Estos espacios se sumarán a los cuatro corners con los que la compañía ya está presente en los centros de Castellana, Goya, Serrano y Pozuelo en Madrid.

Como parte del plan de crecimiento, Bonnet à Pompon lanzará este año una nueva línea de producto basada en los accesorios. “Será una línea más dedicada al pequeño regalo, que se adapta con todos nuestros estampados”, detalla Escalada. Asimismo, la empresa también está trabajando en colaboraciones con varias marcas españolas para el lanzamiento de colecciones cápsula.

Por el momento, la compañía no se plantea abrir nuevas tiendas, especialmente en el extranjero. “Al final, las ferias están inactivas, y los showrooms y los agentes internacionales están apostando más por marcas grandes o con las que ya trabajaban que por otras más pequeñas”, explica Escalada que, no obstante, señala que en España “no estamos totalmente cerrados a nada”, aunque reitera que “no están previstas aperturas”.

Superar los dos millones de euros

La compañía cerró el ejercicio de la pandemia con una cifra de negocio de 1,8 millones de euros, un 20% menos que en 2019. Para este año, la empresa prevé verse impulsada por el plan estratégico que está implementando, y volver a la senda del crecimiento con un alza del 25%, que le permitirá superar los niveles prepandemia, hasta alrededor de 2,25 millones de euros.

Bonnet à Pompon fue fundada en 2009 de la mano de la diseñadora Alejandra Sánchez-Ramade. La marca concentra el grueso de su producción en fábricas en Portugal y España, aunque el 15% de la fabricación se realiza en el extranjero, especialmente en Asia y en Perú. La logística se opera desde Madrid, donde se ubica la sede, y la empresa también trabaja con un centro en la zona de Burgos. La plantilla de la compañía está compuesta, actualmente, por alrededor de cincuenta personas.