Blanco se asoma al concurso

Blanco agudiza su complicada situación. La cadena de moda ha solicitado el preconcurso de acreedores para cuatro de sus sociedades, acuciada por la deuda. Tras el fracaso de las negociaciones con Mango para explorar una venta, la compañía madrileña entrará en concurso si no logra llegar a un acuerdo con sus acreedores en un plazo máximo de cuatro meses.

Si finalmente Blanco entra en concurso de acreedores, se convertirá en el mayor grupo español de distribución de moda que entra en los juzgados. Durante los últimos meses, compañías como Caramelo o Hakei han optado por el concurso de acreedores. La cifra de negocio consolidada de la empresa se sitúa, según datos de la compañía, alrededor de 300 millones de euros.

Cuatro sociedades de Blanco se han acogido al artículo 5 bis de la actual ley concursal, que blinda a la compañía durante cuatro meses impidiendo que sus acreedores le insten el concurso necesario. Se trata de las sociedades Avance y Diseño, Diagomoda, Tiendas Blanco España y Blanco Moda Internacional que, según Expansión, entraron en los juzgados a principios de marzo.

Blanco inicia así una nueva fase, tras haber intentado buscar un inversor para acelerar su desarrollo internacional y haber iniciado negociaciones con Mango, que ha estudiado una integración de la cadena en bloque o de un paquete de sus tiendas. Tal y como adelantó Modaes.es a principios de abril, las negociaciones se rompieron a principios de abril.

La cadena de moda, afectada por problemas de liquidez que le han llevado a retrasar pagos a sus proveedores, propietarios de algunos locales que ocupa y sus trabajadores, iniciará ahora un proceso de cierre de tiendas en España. En paralelo, el grupo está renegociando sus alquileres y plantea incluso la venta de parte de su patrimonio para obtener liquidez.