Blanco, cuenta atrás: los primeros 779 trabajadores abandonarán la empresa a finales de enero

Blanco cuenta sus últimas horas. La cadena madrileña, que presentó su liquidación a finales del pasado año ante el Juzgado de lo Mercantil de Toledo, comenzará en los próximos meses a reducir progresivamente su plantilla, compuesta actualmente por unos 850 empleados.

El grueso de los trabajadores, unos 779 empleados, abandonarán Blanco el próximo 31 de enero, cuando haya sido aprobada la solicitud de liquidación. Otros 21 despedidos saldrán de la empresa el 15 de febrero, según han explicado fuentes sindicales a Europa Press.

Por último, los restantes 18 trabajadores abandonarán Blanco en dos etapas: diez lo harán el 28 de febrero y los ocho restantes el 30 de abril. La liquidación supondrá también el cierre de la totalidad de la red de tiendas del grupo, en torno a 102 establecimientos.

Según los sindicatos, una vez que la empresa haya liquidado plantea “un escenario en el que, en el peor de los casos, sea el Fogasa el que pague las indemnizaciones y salarios adeudados”, aunque la idea inicial es hacerlo de manera progresiva, a medida que la cadena vaya vendiendo las tiendas.

La empresa emplea a alrededor de 850 personas y cuenta con una red de 102 establecimientos

La compañía ya aplicó el pasado año un ajuste de personal que afectó a un máximo de 189 trabajadores, que se sumaron a los 711 que salieron de Blanco en 2013, cuando presentó su primer concurso voluntario de acreedores. 

Pese a la liquidación de Global Leiva, la sociedad con la que opera Blanco, la firma sí podría salvarse in extremis. Jordi Hidalgo Palomares, administrador de la empresa de ingeniería civil Hipaldisa ha realizado una oferta al administrador concursal para hacerse con la cadena. Su interés se limita, sin embarga, a la marca comercial, según Economía Digital.

Blanco entró el pasado año en concurso de inversores por segunda vez en su historia tras fracasar en la búsqueda de un inversor. La compañía, que entró en los juzgados con un pasivo de 133,4 millones de euros, ya había entrado en concurso en 2014, cuando fue rescatada por el grupo saudí Alhokair por cuarenta millones de euros.

Finalmente, tras poner en marcha un tercer expediente de regulación de empleo (ERE) y llevar a cabo una intensa reorganización, la cadena entró en liquidación el pasado diciembre. Actualmente, la empresa está controlada por el fondo saudí AC Modus, a quien Alhokair trasladó Blanco por 83 millones de euros.

Blanco finalizó 2015 con unas pérdidas de 21,72 millones de euros, frente a las de 7,4 millones de euros de un año antes. La compañía alcanzó unas ventas de 105,22 millones de euros, un 2,2% menos que en el ejercicio anterior.