Benetton, descolorida

El grupo italiano Benetton sigue sin recuperar el ritmo. La compañía facturó 2.031 millones de euros en 2011, un 0,4% menos que en el mismo periodo del ejercicio anterior cuando registró 2.053 millones de euros en ventas. En cuanto al beneficio neto del ejercicio 2011, la empresa prevé que sea de aproximadamente 70 millones de euros, frente a los 120 millones de euros registrados en el ejercicio 2010.

La compañía, que el próximo marzo presentará sus resultados completos, ha explicado en un comunicado que, del total de la facturación, 1.912 millones de euros corresponden a la división de prendas de vestir. Esta cifra supone un 1,1% menos en comparación con el ejercicio anterior, cuando esta división facturó 1.948 millones de euros. Por otra parte, la división textil registró una cifra de negocio de 119 millones de euros, un 14% más que en el ejercicio 2010.

Por zonas, Benetton ha visto como sus ventas en Europa caían en 2011 debido a la coyuntura económica. Según sus previsiones para 2012, la situación no variará mucho.

No obstante, países como Rusia y el resto de ex miembros de la URRS experimentaron un crecimiento de doble dígito en su facturación de 2011. También incrementaron sus ventas en mercados como el alemán y el inglés, lo que hizo que la cifra de negocio final sólo decreciera un 2% en todo el año. El descenso se debe, en su mayoría, a la contracción de las ventas en Grecia y la reducción, en menor porcentaje, de facturación en países como España e Italia.

En el mercado sudamericano Benetton incrementó un 30% sus ventas en 2011, gracias a su fuerte crecimiento en países como México. En Estados Unidos y Canadá el grupo ha visto como sus ventas sufrían un descenso del 12% en 2011, asociado a la reestructuración que está llevando a cabo en su red de distribución en esos dos mercados.

Casi todos los países que conforman el mercado asiático, donde Benetton ha incrementado un 5% sus ventas, registraron crecimientos de doble digito. Una excepción es Japón, país en el que el grupo ha tenido que reestructurar su red de puntos de venta debido al desastre natural de marzo de 2011.