Amazon se arma en España: recluta para su nuevo equipo de moda

Amazon arma filas en el reino de Inditex. El gigante estadounidense del ecommerce ha comenzado la búsqueda de un nuevo equipo en España dedicado en exclusiva a moda, un sector que, según fuentes del mercado, se le está resistiendo en Europa.

La plantilla se construirá a imagen y semejanza del equipo de Londres, hasta ahora el único que tiene Amazon en Europa. El nuevo equipo se dedicará tanto a la captación de marcas como la gestación de firmas propias.

La empresa ya ha recurrido en el pasado a talento español para su división de moda. Sergio Bucher fichó por Amazon en 2013 como vicepresidente del segmento de moda del grupo en Europa. El directivo, que durante su trayectoria trabajó para grupos como Inditex, Nike y Puma, ocupó el cargo hasta mayo de 2016, cuando fichó por Debenhams.

Amazon construirá su plantilla en España a imagen del equipo de Londres

Además, la compañía estadounidense también se ha servido de proveedores españoles para la producción de su primera firma de moda creada desde Europa, Find. En concreto, el grupo recurrió a algunos de los principales socios industriales de Inditex en España.

Según el banco estadounidense Wells Fargo, Amazon se convertiría en el mayor distribuidor de moda en Estados Unidos en 2018 desbancando en el puesto a Walmart. Según las previsiones de la entidad financiera, el ecommerce aumentaría un 25% sus ventas de moda en 2018 hasta 30.800 millones de dólares (26.600 millones de euros).

Las marcas de moda pueden operar de tres formas en Amazon: como retailers, vendiendo directamente al cliente final a través de la plataforma; como vendors, marca blanca; y como Sellers, vendiendo el stock a Amazon.

Una marca de moda tiene tres posibilidades de comercializar sus productos en la plataforma del gigante estadounidense: como retailer, coloca su oferta en la web; como vendor, para las compañías que distribuyen sus productos como marca blanca; y como seller, que venden el stock a Amazon, basándose en el modelo del multimarca.

En España, el negocio global del grupo está pilotado por Mariangela Marseglia

Con el objetivo de reivindicarse como un operador de moda por derecho propio, Amazon comenzó en 2009 a lanzar discretamente marcas de básicos en Estados Unidos. En total, el grupo cuenta con alrededor de veinte marcas propias de moda en su cartera.

En 2017, Amazon dio un paso más allá creando su primera marca de moda desde Europa, Find, y apostando más por el diseño y tendencia. La firma del grupo se comercializa en cinco mercados europeos: Reino Unido, España, Alemania, Francia e Italia.

Desde el lanzamiento de Find, el grupo ha ido subiendo peldaños en moda con la creación en el último año de otras marcas como Iris&Lilly, especializada en lencería y ropa de baño, Truth&Fable, de moda de fiesta y Meraki, de básicos. Además, el grupo está gestando la creación de una nueva enseña para abordar el mercado del athleisure.

El grupo ha lanzado tres marcas propias de moda desde su sede en Europa

La división de Amazon Fashion en Europa opera de forma independiente a la de estadounidense. Amazon Fashion en Europa está liderada por Susan Saideman, que relevó a Sergio Bucher en el cargo después de que el ejecutivo abandonara la empresa de ecommerce para fichar por Debenhams.

En paralelo, el grupo también está potenciando su apuesta por la moda con acciones como colaboraciones con celebrities, como Drew Barrimore o Sarah Jessica Parker, o el lanzamiento de Prime Wardobre, un espejo inteligente que combina realidad virtual con aumentada.

La sede de Amazon en España se encuentra en el complejo Prado Business Park (Madrid) en unas instalaciones de 12.000 metros cuadrados de superficie. El negocio del gigante estadounidense en el país está pilotado desde el pasado mayo por Mariangela Marseglia, quien también es responsable del grupo en el mercado italiano.

El gigante estadounidense cerró el ejercicio 2018 multiplicando por tres su beneficio neto hasta 10.073 millones de dólares (8.961,8 millones de euros). Las ventas del grupo, por su parte, se situaron en 232.887 millones de dólares (207.197 millones de euros), un 31% más que el año anterior.