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Álvaro Toubes (Asepri): “No veo a ningún operador con capacidad de empezar a hacer compras”

El presidente de la Asociación Española de Productos para la Infancia (Asepri) y gerente de la marca Paz Rodríguez asegura que una de las claves para el sector será la colaboración entre operadores y el lanzamiento de nuevas líneas de producto para adaptarse al contexto.

Laura Juanes

20 may 2021 - 04:52

Álvaro Toubes (Asepri): “No veo a ningún operador con capacidad de empezar a hacer compras”

 

 

Para Álvaro Toubes, presidente de la Asociación Española de Productos para la Infancia (Asepri), la recuperación del sector está todavía por llegar, pese al avance de la campaña de vacunación y a la reapertura de tiendas. El ejecutivo, también gerente de la marca de moda infantil Paz Rodríguez, cree que el consumidor se orientará cada vez más hacia un producto diferenciado, y que los operadores deberán hacer frente a la caída de la natalidad que España vienen concatenando desde hace años con el lanzamiento de nuevas líneas de producto. Más allá de la globalización y de una concentración de operadores, el directivo defiende que es necesario que las empresas inviertan en la creación de “artículos con alma”, y aboga por la colaboración y las sinergias entre compañías para fortalecer un sector muy mermado por la crisis de la pandemia.

 

 

Pregunta: Operadores como Tendam o &Others Stories han entrado recientemente en moda infantil. ¿Es bueno para el sector?


Respuesta: Sí, todas las nuevas entradas son bienvenidas, y para los consumidores, cuanta más oferta, mejor. Lo importante es que los nuevos operadores aporten valor. En el sector tenemos la vista puesta no sólo en el mercado nacional, sino también en el exterior, pero la entrada de nuevas empresas refuerza nuestro mercado, y cuanto más fuerte sea, mejor.

 

 

P.: La moda infantil es un sector tradicionalmente formado por pymes. ¿Sufre más por ello?


R.: Es difícil medir quién sufre más y menos. Nosotros estamos sufriendo bastante. En el sector somos muchas pymes, y esto no creo que tenga una gran influencia, porque en moda de mujer y caballero también hay muchas empresas pequeñas y medianas y también sufriendo mucho, por lo que no es algo que sea característico especialmente de moda infantil. Es verdad que a veces contamos con una menor capacidad tecnológica para dar saltos cualitativos, pero las pymes nos ofrecen mucha flexibilidad, capacidad de reacción y mucha rapidez en el cambio. La cuestión es que este tipo de empresas cuenten con las ayudas necesarias para dar el salto que necesitan. Algunas ya lo han dado, pero es importante que, las que necesiten un apoyo, lo tengan.

 

 

P.: ¿La crisis económica tras la sanitaria va a comportar una presión de precios en el sector?


R.: Sí. Llevamos mucho tiempo con presión de precios. En esta campaña quizás sea ligeramente agravada, porque esto no se ha solucionado. Veníamos de una época de descuentos, de tendencia a la baja de compras en tiendas y es probable que esto tarde en desaparecer. Todo apunta a que seguiremos bastante tiempo con esta tendencia, especialmente en España, donde somos muy sensibles al precio. Pero también es cierto que los consumidores van a pedir más diferenciación, un producto más genuino y especial, y esto puede comportar un subidón. Creo que las empresas que opten por una diferenciación y por dar un valor especial a su propuesta van a poder encontrar suficientes consumidores que compren su producto, siendo el precio algo más independiente. Se va a mantener la tendencia de descuentos en muchos artículos y para un rango de consumidores determinado, pero creo que va a haber otro grupo de clientes para los que esto no será así.

 

 

 

 

P.: ¿Veremos más colaboraciones en los próximos meses, como la de Bóboli vendiendo en Tendam?


R.: Sí y, además, desde Asepri fomentamos mucho la colaboración entre empresas. El objetivo es que las empresas colaboren entre sí como puedan para sacar partido a sus activos, generar oportunidades negocio, sinergias, compartir recursos y costes… Creo que veremos muchas más colaboraciones de este tipo. Hay inicios de colaboraciones que se pueden extender a otros ámbitos. A veces se empieza con muestras que las empresas se intercambian y envían a clientes, compras y misiones comerciales conjuntas, compartir distribuidores e información… Esto ya se hace en muchos casos, y es algo especialmente valioso en el sector de la moda infantil y la puericultura, donde las compañías estamos muy unidas y nos hacemos fuertes con las sinergias.

 

 

P.: ¿Vamos hacia un proceso de concentración del sector?


R.: Sí, pero es probable que las operaciones corporativas sean limitadas en cuanto a la realización de operaciones coordinadas o la intervención de la administración para aglutinar pequeños operadores. Además, hemos visto que algunas compras que fondos de inversión habían hecho en España no han salido bien, con lo cual es otro negocio parado. No veo a medio plazo a ningún operador con capacidad de empezar a hacer compras, y que esto provoque que se reduzca el número de empresas del sector de forma sustancial. Más que por compras, creo que cambiará el panorama porque habrá empresas que se deshagan, se liquiden, otras que no podrán continuar… Pero, en todo caso, no creo que se dé una avalancha de operaciones en los próximos meses.

 

 

P.: En España, la moda infantil está muy focalizada en fiesta. La pandemia ha golpeado con más dureza al sector. Más allá del Covid-19, ¿fue un error focalizarse tanto o es algo coyuntural?


R.: En el ámbito de la moda infantil española hay mucho de todo: hay fiesta y comunión, pero también hay moda más elegante u otra para llevar en el día a día. Es verdad que la pandemia afectó mucho al sector de fiesta y comunión, que ahora está empezando a retomar su actividad. Pero no creo que fuera un error que las empresas se focalizaran en esta parte del negocio, porque nadie podía prever una pandemia de este tipo y que se iban a parar celebraciones con tanto arraigo como comuniones y bautizos.

 

 

 

 

P.: Bóboli acaba de lanzar una colección de homewear. ¿Veremos nacer nuevos nichos en moda infantil?


R.: Creo que sí. En España existe el gran problema de la natalidad, que no es sólo del sector, sino que es social. Quizás se tenga que abrir un debate para ver si tenemos que afrontar este problema y cómo, pero es una realidad que están naciendo menos niños, lo que hace que el sector tenga menos clientes y, por ello, las empresas tengan que ampliar líneas de producto para mantenerse. Si tienes menos trabajo en un lado, tienes que sacarlo de otro. Van a surgir nuevos nichos y nuevas propuestas diferentes a lo que hemos visto hasta ahora. El que no tenga una colección de baño la va a tener que crear, en artículos de estar por casa igual… Las empresas harán cualquier cosa que les permita reducir costes y aguantar su estructura.

 

 

P.: La natalidad llevaba años a la baja en España y, tras el estallido del Covid-19, se habló de un baby boom pandémico, que por el momento no ha llegado. ¿Cree que puede llegar tras la crisis? 


R.: Lo que ha habido es un anti baby boom. Las estadísticas a principios de este año eran horrorosas, con descensos de hasta el 20% comparado con el año pasado. Esto supone un panorama negro para todos, no sólo para el sector de moda infantil. En el futuro, gran parte de las generaciones jóvenes no va a estar, y no tendremos fuerza laboral para sacar el país adelante. Afecta mucho que las condiciones ahora mismo no son buenas: tener hijos es, a veces, una apuesta arriesgada. En España nos cuesta tener hijos porque muchos no ven claro si serán capaces de mantener a la familia. Las administraciones, la sociedad y las empresas tenemos que dar garantías a los jóvenes de que van a tener una subida laboral. Esto es un poco como el cambio climático: parece que no nos afecta, porque es algo que se se extiende en el tiempo, pero va a llegar un momento donde veremos que es un problema muy grande.

 

 

P.: ¿Cuándo se recuperará el sector?


R.: Esperemos que no haya complicaciones desde punto de vista sanitario, porque hasta hace poco en algunos países las tiendas estaban todavía cerradas, como es el caso de Francia. Ahora, con las tiendas abiertas y las vacunas, es posible que se pueda retomar la actividad y mejoren las perspectivas, que continúan siendo complicadas e inciertas. No se sabe muy bien cómo van a salir las cosas: por lo que respecta al consumidor, hay mucha gente que no tiene claro su futuro laboral, y hay problemas de confianza, por lo que tendremos que ver cómo responde el cliente en los próximos meses. Creo que, aun retomando la normalidad, la recuperación va a ser muy complicada. No esperamos una gran alegría, con gente corriendo en avalancha a las tiendas. Va a haber que luchar por el cliente y por ofrecerle algo que le ilusione.

 

 

 

 

P.: La moda infantil es, aún, muy local. ¿Esta crisis, y la desaparición de operadores en el sector, pueden ser un acelerador de globalización?


R.: Puede ser, pero no creo que vayamos mucho más allá de donde estamos ahora. Puede ser que sí, pero lo dudo: creo que, en el sector de la moda, va a haber cada vez más un consumidor más consciente de la importancia de las prendas originales, de marcas con alma, historia y algo diferente, y esto está reñido con la globalización, que se basa en un producto estandarizado y a bajo precio. Creo que ya tenemos bastante de esto, y que se puede ir más allá, pero el fenómeno más destacable que viene es la toma de conciencia hacia la sostenibilidad por parte del cliente que, además, avanza hacia un producto más especial y diferenciado.

 

 

P.: La feria BabyKid Spain estaba prevista para este febrero, pero se canceló por la pandemia. ¿Cuáles son los planes para la próxima edición?


R.: Nuestra intención era celebrarla, pero en 2020 vimos que era complicado marcar una fecha para febrero de 2021 y decidimos no convocarla. Desde el sector de la puericultura, que es muy activo, siempre se ha promovido la celebración de este encuentro anual. Queremos que la feria vuelva a llevarse a cabo en Valencia a finales de enero del año que viene o principios de febrero. Probablemente en julio lanzaremos la convocatoria, porque hay mucho interés por parte de las empresas del sector de la moda infantil y la puericultura en participar. También hay muchas ganas por parte de las tiendas y empresas de volver a encontrarse y presentar sus propuestas de forma directa y retomar el contacto con los clientes. BabyKid nació para juntar todo el universo infantil, y todo el que quiera y tenga sentido que se aproxime tiene cabida en la feria.