Shiseido coloca a una ex Chanel y LVMH al frente de su negocio mundial de perfumes

Shiseido ficha a una veterana del sector para pilotar su negocio de perfumería. El titán japonés de la cosmética ha nombrado a Isabelle Gex, ex directiva de grupos como Chanel y LVMH, como nueva presidenta global de esta división. La ejecutiva, que asumirá el cargo el próximo 11 de junio, estará al frente de los perfumes de Dolce&Gabanna, Narciso Rodríguez, Issey Miyake, Elie Saab, Zadig&Voltaire y Alaïa, entre otros.

Gex reportará al presidente y responsable de Shiseido en Europa, Oriente Medio y África, Franck Marilly, así como a Masahiko Uotani, presidente y consejero delegado de la compañía a escala global. La ejecutiva liderará la estrategia de la empresa en el área de perfumes y buscará nuevas oportunidades de negocio a través de la compra de nuevas marcas o acuerdos de licencia con otros grupos.

Audrey Briotet, responsable global dentro de Shiseido de la licencia de Dolce&Gabbana, y Guillaume Gellusseau, al frente de Serge Lutens, reportarán a Gex.

Shiseido ha fichado a Isabelle Gex como responsable global de fragancias, que engloba las licencias de marcas como Dolce&Gabbana e Issey Miyake

La directiva se incorpora al grupo japonés procedente de Stratlux, empresa de datos fundada y dirigida por ella misma, al tiempo que ejercía como business angel en el sector del lujo. Gex, máster en Economía y Gestión por Essec, inició su carrera en Chanel como directora internacional de márketing de fragancias y cosmética en 1996.

En 2001, la ejecutiva pasó a liderar la estrategia de márketing y el negocio de perfumes de Givenchy, propiedad del conglomerado LVMH. Tras siete años en el puesto, Gex fue ascendido como presidenta global de fragancias en el grupo de lujo. Desde 2015, la directiva colabora como asesora externa con LVMH.

Shiseido cerró el primer trimestre del ejercicio con un alza del 13,5% en sus ventas, hasta 263.760 millones de yenes (2.023 millones de euros), aupadas por el crecimiento en Japón y China. El ingreso neto atribuible al grupo se situó en 28.870 millones de yenes (221,5 millones de euros), el doble que en el mismo periodo de 2017.