La presidenta de marcas de Estée Lauder abandona la compañía

Nuevos cambios en la cúpula de la moda internacional. Lynne Greene, la presidenta de marcas del grupo de cosmética Estée Lauder, ha decidido retirarse y abandonar la compañía. Greene lleva desde los veinte años en el sector. En los años setenta se incorporó a Estée Lauder, donde ha permanecido toda su carrera, salvo los cinco años que trabajó para su máximo competidor, el grupo L’Oréal.

En este tiempo, Greene ha ascendido de una ejecutiva de cuentas en Saint Louis, en Estados Unidos, a ocupar la presidencia de las cuatro divisiones del grupo. Actualmente, es la responsable de Clinique, Aveda, Origins, Ojon, Darphin, y la línea de cuidado facial para hombre. La fecha oficial de su jubilación será el próximo 30 de junio, tras un periodo de transición que comenzará en enero.

Estée Lauder cerró su último ejercicio fiscal con un descenso del 9,2% en su beneficio neto. El grupo concluyó 2014 con ganancias de 1.090 millones de dólares (981 millones de euros), y sus ventas alcanzaron 10.780 millones de dólares (9.700 millones de euros), un 2% menos que el año anterior.