¿Qué hacer para que una tienda online funcione?

Modaes.- ¿Cuál es la situación actual del comercio electrónico en España? ¿Hacia dónde se dirige este modelo de negocio? Y, ¿es cierto que con tener un espacio en la Red donde vender ya basta? Estas son algunas de las preguntas que se hacen las empresas de moda antes de lanzarse a la aventura online. La constancia, una buena atención al cliente y una campaña de comunicación eficaz son algunas de las claves del comercio electrónico.

Según Koro Castellanos, directora general de BuyVip, “el e-commerce no está sufriendo tanto como el comercio a pie de calle en el sector de la moda”. En 2010, las transacciones realizadas por Internet en España llegaron a registrar 100 millones de euros, algo que posiciona al comercio electrónico como un fenómeno consolidado.

“Según encuestas realizadas en referencia a la intención de compra por Internet, la moda y los complementos se encuentran en el segundo lugar –explicó el pasado viernes Castellanos en una conferencia sobre comercio electrónico en el marco de Mentes&Moda-; el español gasta ochenta euros de media en compras por la Red”.

“Cuatro de cada diez españoles compra por Internet”, aseguró Castellanos. Una de las claves y objetivos que se marca el e-commerce es demostrar al consumidor que es seguro y que las estafas por Internet son cada vez menores. “Sólo un 5% de las transacciones que se hacen por el canal online son desfavorables para el comprador, y suelen ser derivadas de fallos en las entregas o por incumplimiento de los plazos”, afirmó Castellanos.

Una de las claves que hay que tener en cuenta para que un establecimiento online funcione es la atención al cliente. Uno de los ejemplos utilizados en la ponencia como caso de éxito fue el de la plataforma online de venta de calzado Zappos, que desde su call center, abierto las veinticuatro horas del día, atiende consultas que van más allá de su marca.

Para finalizar, recalcó la importancia de las compras en tiendas electrónicas y la interacción con los smartphones. “Sólo en 2010 se gastaron más de nueve millones de euros en publicidad en estas plataformas”, concluye Castellanos.

La publicidad en los dispositivos móviles ha pasado de ser algo intrusivo y molesto a convertirse en un valor añadido. Desde el móvill se pueden realizar compras e incluso, gracias a la geo localización, avisar al consumidor de ofertas especiales en establecimientos físicos mientras pasea o hace sus compras en un centro comercial.