Pepita Marín, la española que dio una nueva vida al tricotaje

Volver a poner de moda una actividad que siempre había estado presente en las casas de los españoles: el tricotaje de jerséis, mantas o bufandas. Rescatando la tradición de las abuelas y madres, que tejían sus propias prendas de lana, Pepita Marín puso en marcha, junto con Alberto Bravo, We Are Knitters en 2011.

Licenciados ambos en Empresariales, emprendieron en su veintena con la compañía mientras trabajaban en la consultora PwC. Tras un viaje por Estados Unidos, donde descubrieron que allí tejer estaba de moda, los socios tuvieron la idea de fundar una empresa que reviviera esta afición en España, relegada desde hacía años a un entretenimiento para gente mayor.

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Después de dejar PwC, Marín y Bravo fundaron We Are Knitters, una plataforma de ecommerce especializada en la venta de kits de tejer y de crochet, formados por ovillos cien por cien naturales procedentes de Perú, agujas producidas artesanalmente y un patrón explicando todos los pasos de manera muy sencilla. La compañía ha llevado a cabo un lavado de cara a esta actividad y ha creado un nuevo mercado en España, cosechando una buena acogida entre sus clientes.

Con sede central en Madrid y una plantilla de treinta personas, We Are Knitters ha encontrado en el mercado internacional su principal motor de crecimiento. La empresa exporta el 95% de sus productos, y mientras Estados Unidos, Alemania, Francia, Reino Unido e Italia encabezan la lista de sus principales mercados, España se posiciona como el sexto. Por ello, la empresa ha abierto dos almacenes en el exterior para poder dar respuesta a la cantidad de pedidos que gestiona: uno en Alemania y otro en Estados Unidos.

Con el estallido de la pandemia en España, el negocio despegó. En marzo, We Are Knitters registró un pico, vendiendo 100.000 euros en un solo día, y en abril disparó sus ventas un 240% respecto al mismo mes de 2019. En pocos meses, la empresa logró batir las previsiones marcadas para el ejercicio de 2020, que comenzó el pasado mayo.

A lo largo de su trayectoria, We Are Knitters ha atraído a diferentes inversores. El pasado julio, Bewater Funds invirtió 800.000 euros en la empresa con el lanzamiento de un nuevo fondo de inversión colectiva. En la actualidad, We Are Knitters cuenta con una cartera de 600.000 clientes en todo el mundo, y factura 15 millones de euros anuales.