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Nick Robertson: conquistando el mundo a golpe de ‘click’

Iria P. Gestal

13 jul 2015 - 04:38

Pequeñas o grandes innovaciones que han cambiado el devenir de la industria de la moda. Desde transformar una sencilla pieza de caucho en un marca a crear un complejo sistema logístico y de aprovisionamiento con la tienda en el centro. A lo largo de la historia, una serie de visionarios han impactado en la moda cambiando las reglas del juego: son los alquimistas de la moda. Los grandes almacenes, la moda rápida, el bajo coste o la lycra no existirían sin el genio de nombres como Aristide Boucicaut, Amancio Ortega, Arthur Ryan o Joseph Shivers. En esta tercera edición del Quién es Quién de Empresas de Moda en España, patrocinado por Aguirre Newman, Modaes.es realiza una selección de veinte de los empresarios y ejecutivos que más influencia han tenido en la industria de la moda internacional a lo largo de la historia reciente.

 

 

 Nick Robertson

 

 

 

En 2000, Nick Robertson y Quentin Griffiths pusieron en marcha un pequeño negocio que permitía comprar online ropa similar a la que llevaban personajes famosos en televisión. Asos nació uniendo tres conceptos en alza por aquel entonces: la venta por Internet, las celebrities y el fast fashion. Una década más tarde, ha cambiado el copia-pega por líneas y contenidos propios, y se ha convertido en el lugar al que las veinteañeras acuden no sólo a comprar, sino también para saber qué está de moda.

 

Asos se ha convertido en la web de moda líder el mercado británico y la sexta en el mundo, un gigante con cerca de ocho millones de usuarios activos que el año pasado rozó los mil millones de euros de facturación.

 

Y todo surgió gracias a la serie Friends. En 1999, Robertson y Griffiths leyeron que NBC, la cadena de televisión que emitía Friends en Estados Unidos, había recibido miles de llamadas de espectadores preguntando dónde podían comprar una lámpara que había aparecido en la serie. Se plantearon entonces crear una página web donde poder encontrar productos que aparecieran en programas y series de televisión, y nació As Seen on Screen.

 

Los dos socios, sin experiencia en el sector de la moda, sí contaban, en cambio, con un amplio background en márketing y publicidad. Nick Robertson, que había dejado el colegio a los 16 años, era hijo de un ejecutivo publicitario y su abuelo, Austin Reed, era el fundador de la compañía inglesa de moda masculina del mismo nombre.

 

Después de pasar por dos agencias de publicidad, en 1995 fundó Griffiths Entertainment Marketing, una empresa de márketing dedicada a gestionar el product placement de marcas como Carlsberg.

 

Cuando pusieron en marcha As Seen on Screen, contrataron como comprador a Lorri Penn, que hasta entonces trabajaba para el grupo propietario de Topshop, Arcadia. Fue Penn quien propuso la idea de vender solamente ropa, y el resto ya es historia.

 

As Seen on Screen se convirtió en Asos, y a los cuatro años de su fundación la empresa ya daba beneficios. En 2004, se creó la línea propia de moda femenina de la marca, a la que poco después se sumarían dos más, de moda masculina y de productos de belleza.