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NAC, o cómo obviar la crisis del multimarca

Modaes

11 jul 2014 - 04:43

NAC recurso tienda 635

 

Algo más de una década es lo que lleva Nani Vázquez al frente de su propia compañía. Vázquez decidió, a la vuelta de un viaje a Londres con su familia, fundar lo que ahora es NAC, un espacio de distribución multimarca que cuenta con seis puntos de venta entre Madrid y Menorca y un séptimo en camino, que abrirá sus puertas el próximo septiembre en la capital de España. Fue gracias a su familia que el negocio tiene nombre: las iniciales de los nombres de sus hijos Alejandra y Carlos forman, junto a la suya, las siglas de NAC.

 

En NAC se pueden encontrar marcas como Reiko, Stuart Weitzman, La Fee Maraboutee o Antik Batik, que escogen tanto Vázquez como sus dos hijos. “El criterio de selección es muy instintivo, nos guiamos mucho por lo que nos gusta y creemos que puede encajar en el concepto; somos fieles a nosotros mismos”, destacan desde la empresa.

 

Aunque el proyecto empresarial de Vázquez empezó con NAC, la empresaria decidió, hace cuatro años, diversificar para abarcar más público.

 

Fue entonces cuando puso en marcha el segundo de sus proyectos: The Corner, un espacio multimarca dirigido a un público más joven. “The Corner es NAC hace catorce años, es una vuelta a los orígenes de la compañía pero con un giro, con un aire renovado y centrado en una clienta más cosmopolita y ecléctica”, explican desde la compañía.

 

The Corner, que distribuye marcas como Bensimon, tiene dos puntos de venta en Madrid, ubicados en la calle Orellana y en la calle Huertas.

 

Después de NAC y The Corner, Vázquez no quiso quedarse ahí y, por ello, hace un año, puso en marcha su último proyecto, la marca de ropa 4Reasons, que nació de la mano de Fiona Ferrer y que se distribuye tanto en NAC como en The Corner.

 

Nani Vázquez, fundadora de NAC, cuenta con una larga experiencia en el negocio de la moda. Antes de poner en marcha NAC, la empresaria había trabajado en proyectos relacionados con el sector. Vázquez se vinculó por primera vez con la ropa para ayudar a una amiga que acababa de poner en marcha una tienda. Ahí se enganchó y decidió seguir en el sector, hasta que decidió dejar su trabajo para marcharse a Reino Unido. Pero poco le duró el exilio, porque a su vuelta puso los cimientos de la que hoy es su empresa.