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Muïc, bisutería barroca de alta gama

S. García

17 ene 2014 - 04:40

 

 

“Después de terminar el MBA en gestión de empresas de moda y de trabajar en comunicación corporativa tuve claro que quería iniciar un proyecto propio relacionado con el sector”. Así de clara es Ana Pérez Lafuente, fundadora de Muïc, un espacio multimarca ubicado en la calle Ayala de Madrid. Antes de empezar, Pérez decidió conocer el sector y dedicó varios meses a recorrer las principales ferias europeas del negocio de la moda. Allí cambió el enfoque de su proyecto: “en París me di cuenta de lo caro que era realizar mi concepto y para reducir costes me pedían unas cantidades mínimas a las que no iba a llegar”, sostiene. Pese a la decepción inicial, Pérez continuó visitando salones en la ciudad de la luz y fue en uno de ellos en el que descubrió la bisutería de alta gama.

 

“Me enamoré del concepto de mezclar piedras semipreciosas y llevarlas a bisutería, por lo que escogí una marca y monté un showroom en el madrileño Paseo de la Castellana”, explica. Ese espacio sirvió a Pérez como test y la empujó a saltar a pie de calle.

 

“Me di cuenta que las enseñas que me gustaban no habían llegado a España y que el concepto de la alta bisutería con un toque más barroco que yo había descubierto no existía; fue entonces cuando nació Muïc”, destaca Pérez. Tres años después, Muïc se ha posicionado como un espacio alternativo en el que encontrar bisutería de alta gama de enseñas internacionales como Dannijo, Mawi, Iosselliani o Shourouk y su fundadora se ha ganado un espacio en los showrooms y la lista de clientes de marcas que cada vez tienen más adeptos. “Empecé teniendo grandes problemas porque era una completa desconocida y ni compraba ni compro grandes volúmenes, por lo que no fue sencillo convencerles; aunque el tiempo me ha dado la razón y ahora es más sencillo”, subraya Pérez. La fundadora de Muïc compra una pieza por modelo e invierte alrededor de 20.000 euros por colección dos veces al año. Muïc concluyó el ejercicio 2012 con una facturación de 82.000 euros.

 

Un gen empresarial que venía de familia y un gusto adquirido por las piedras semipreciosas llevaron a la emprendedora Ana Pérez Lafuente a fundar su propia compañía. Tras viajar a las principales ferias del negocio de la moda, Pérez se dio cuenta de que la ropa no era lo suyo y que lo que realmente le apasionaba era la bisutería de alta gama. Con esa idea en mente nació Muïc, un espacio multimarca dedicado a marcas como Dannijo o Mawi.