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Miren Vives (Museo Balenciaga): “En España la moda todavía no se percibe en toda su dimensión cultural”

La directora del Museo Balenciaga defiende que el museo es una institución sostenible con un impacto que se extiende más allá del pequeño pueblo de Guetaria.

Iria P. Gestal

10 oct 2019 - 04:44

Miren Vives (Museo Balenciaga): “En España la moda todavía no se percibe en toda su dimensión cultural”

 

 

Miren Vives tomó las riendas del Museo Balenciaga en aguas turbulentas. La institución, financiada por el Ministerio de Cultura, el Gobierno vasco y la Diputación Foral de Gipuzkoa, había estado al borde del cierre el año anterior, y el exalcalde de Getaria (condenado el pasado julio a cuatro meses de prisión) y el arquitecto del centro acababan de ser imputados por administración desleal y malversación.

 

Cinco años después, Vives, donostiarra de nacimiento y licenciada en Económicas por Deusto, defiende que el museo es una institución sostenible y con un impacto que se extiende más allá de las fronteras del pequeño pueblo de Getaria.

 

“Revierte en conocimiento, en nuestro caso de la figura de Cristóbal Balenciaga; somos un recurso cultural y turístico y también contribuimos a sensibilizar a parte del público hacia pautas de consumo más informado, dando valor a lo que se está comprando y consumiendo”, asegura. En su periodo al frente de la institución, también el número de visitantes al museo se ha incrementado, alcanzando 53.000 visitantes el año pasado.

 

 

 

 

Su crecimiento coincide, además, con la era dorada de la moda en los museos, del Victoria&Albert de Londres al Thyssen de Madrid. “La moda se presta más que otro tipo de exposiciones al espectáculo y es muy potente desde el punto de vista del público porque nos resulta muy cercano: es identificativo tanto desde el punto de vista social como personal”, asegura.

 

Pero más allá del efecto llamada por el glamour del sector, Vives defiende que todavía es necesario seguir trabajando para transmitir los otros valores de la moda, como el patrimonial. “Nos queda mucho por hacer para que haya una cultura de moda en España”, reivindica. “La moda se ve como negocio, porque tenemos grandes empresas en el sector; y como artículo de consumo, pero todavía no se percibe en toda su dimensión cultural”, asegura.

 

Ese balance entre negocio y cultura se traslada también a la gestión del museo. “Se necesita un buen mix: un museo como este sin el expertise del equipo de conservación y la dirección de colecciones no tendría el rigor y la perspectiva de valores de Balenciaga que nos interesa”, sostiene Vives. “Por el contrario, si sólo tuviéramos expertos en historia de la moda, la perspectiva de cómo llegar a los públicos no sería tan fácil de lograr”, apunta.

 

 

Doble celebración

El próximo año, el museo se vestirá de largo para celebrar dos hitos: el 125 aniversario del nacimiento de Cristóbal Balenciaga y el décimo cumpleaños del museo. “Nuestros objetivos son aprovechar estos hitos más comunicativos y mediáticos y nuevos contenidos y proyectos interesantes”, apunta Miriam Vives.

 

Entre las iniciativas ya en marcha se encuentra un programa de colaboración con universidades de todo el mundo, por el que alumnos de ciudades como Nueva York, Londres o Tokio acuden a Getaria para conocer e investigar sobre la figura del modisto español, según explica la directora del Museo Balenciaga.