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Luis San José (AGM Abogados): “La legislación laboral es arcaica, tendría que ser más fácil”

El abogado, con más de 25 años de trayectoria en Derecho del Trabajo y Seguridad Social, reclama más subvenciones y bonificaciones para reanimar la economía tras la pandemia.

I. P. G.

30 abr 2021 - 04:58

Luis San José (AGM Abogados): “La legislación laboral es arcaica, tendría que ser más fácil”

 

 

Luis San José Gras lleva más de 25 años dedicado a la rama de la abogacía que más trabajo ha tenido en el último año. El socio de AGM Abogados está especializado en Derecho del Trabajo y Seguridad Social, y ha vivido en primera persona una pandemia marcada en lo laboral por los expedientes de regulación temporal de empleo (Ertes), primero, y los EREs, después. Para San José, ha faltado claridad en la norma y en el proceso y se ha obligado a los empresarios a ejercer “de funcionarios”. Ahora, el abogado propone bonificaciones y abaratar los costes laborales para volver a dinamizar el empleo y evitar la destrucción de tejido empresarial.

 

 

Pregunta: ¿Qué ha fallado en la legislación laboral durante la pandemia?


Respuesta: Claridad en la norma y en el proceso, y también por parte de las instituciones a la hora de dar información. Ese es el gran problema. Y todo el trámite de gestión de la prestación por desempleo se ha traspasado a las empresas, que han hecho de empresas-funcionario. Han tenido que hacer todo para que las medallas se lleve el Gobierno.

 


P.: ¿Algo se ha hecho bien?


R.: En términos generales, lo que se ha hecho bien es aplicar los Ertes como figura. El planteamiento es bueno, es lo que han hecho todos los países de la Unión Europea, pero el resto lo han legislado muy claramente, con teléfonos de atención al público… Aquí no hemos estado atendidos y la reacción ha sido a salto de mata.

 

 

P.: ¿La regulación ahora es correcta para afrontar la situación actual?


R.: Ahora sí. Hemos aprendido poco a poco, pero aún hacemos de empresario-funcionario y tenemos que tramitar todos y cada uno de los documentos como si fuéramos el Sepe. Dicho esto, hay algunos casos, como la Generalitat catalana, que ha resulto favorablemente los expedientes y ha actuado correctamente.

 

 

P.: Tras los Ertes, ahora llegan los EREs…


R.: El paso de Ertes a EREs va a venir por la crisis que ya se está cocinando. Van a empezar a caer uno tras otro. En moda, en particular, las tiendas grandes creo que podrán aguantar, pero los pequeños, sino tienen ahorros, van a caer.

 

 

 


P.: En moda hay muchos procesos en marcha, ¿se están gestionando bien?


R.: Se está gestionando con la legislación que tenemos ahora, que es una legislación desde 1995. La jurisprudencia sí se ha ido cambiando, pero la legislación es arcaica y tendría que ser un poco más dinámica, un poco más fácil. Sí se tienen que ver las dos partes, pero tendría que ser más rápido porque se alargan mucho las reuniones.

 

 

P.: ¿Habrá una destrucción de empleo como la de la crisis financiera?


R.: Puede ser similar. Nos tenían que ayudar un poco más, con más subvenciones, y abaratar realmente la Seguridad Social para poder mantener el tejido empresarial. También habría que potenciar la contratación laboral y los contratos indefinidos, pero con muchas bonificaciones y muchas exenciones. Si contrato a trabajadores que salen de un Erte de otra empresa, por ejemplo, debería de estar bonificado casi al cien por cien.

 

 

P.: ¿Habrá cambios estructurales?


R.: Va a haber una reforma laboral, pero light, porque Bruselas no va a dejar hacer una reforma de todo el estatuto de los trabajadores como pretende el Gobierno. Se tocará algún artículo, pero no más. De aquí tendría que salir una reforma más tutelada para los empresarios, para que vuelvan otra vez a rehacer sus empresas.

 

 

P.: Se han anunciado ya grandes ajustes en banca y retail. ¿Cómo se reincorpora a toda esa gente?


R.: Es difícil. Lo que tendríamos que hacer serían bonificaciones y potenciar la relación indefinida con la finalidad de que no cueste nada ese trabajador, más que el salario: el Estado ya cobra por el Irpf. El empresario está ahogado. Lo mismo con la jubilación: los empleados de 67 años se sienten jóvenes y quieren seguir trabajando, así que potenciemos que no se pague más por ellos y que se les mantenga el empleo. Dicho esto, también hay que sancionar a las empresas que despiden sin causa: si te bonifico es para que mantengas el empleo, si despides al bonificado tienes que devolverlo.

 

 

P.: El otro gran cambio que deja la pandemia es el teletrabajo. ¿Está suficientemente regulado?


R.: Está bastante bien regulado en el artículo 13 del Estatuto de los Trabajadores y posteriormente en el Real Decreto 28/2020. Es una legislación fácil. El problema está en que los empresarios no controlan y en que tu espacio de trabajo en casa tiene que ser una calca del de tu empresa y, si no tienes espacio, no puedes hacer teletrabajo.