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Los pilotos del RSC de la moda internacional

S. Riera

16 dic 2014 - 04:45

¿Quiénes pilotan las estrategias de responsabilidad social corporativa de las mayores empresas de moda del mundo? Las políticas en RSC han terminado por imponerse en las estructuras de los grandes grupos del sector. Inditex, H&M, Gap, Fast Retailing, Primark o Bestseller cuentan con departamentos específicos al frente de los cuales se sitúan directivos especialistas en esta materia, clave para determinar la cadena de suministro, entre otras cuestiones.

 

El último movimiento en este ámbito ha venido de C&A. La compañía holandesa de moda ha fichado al hasta ahora responsable de desarrollo sostenible en McDonalds, Jeffrey Hogue. El directivo, que además de trabajar en la cadena de restauración también estuvo al frente del RSC de la química Dupont, tomará las riendas de la estrategia en responsabilidad social de C&A.

 

El grupo holandés focaliza desde hace años su actividad en RSC en la compra de algodón orgánico. La compañía de distribución apuesta por elaborar sus prendas con una materia prima procedente de cultivos sostenibles. C&A es, junto a H&M, una de las empresas de moda que utiliza un mayor volumen de este tipo de algodón en su producción.

 

Uno de los pesos pesados en políticas de RSC es el español Javier Chércoles, quien durante diez años pilotó la estrategia en esta materia en Inditex. Desde 2013, el directivo es asesor en gestión de crisis en Primark. Chércoles imparte clases de esta materia en varias universidades, entre las cuales figura la de Dacca, en Bangladesh, y durante un año fue miembro del consejo asesor en derechos humanos y laborales del gigante textil chino Yee Tung Group.

 

De hecho, Primark ha sido una de las empresas que más ha reforzado su estrategia de RSC en los últimos años. En Bangladesh, al margen de colaborar con las agrupaciones internacionales para la inspección de las fábricas de ropa del país, el grupo irlandés también ha inspeccionado por su cuenta todas las factorías de sus proveedores. En 2014, el grupo también ha iniciado un proyecto en India para mejorar las condiciones laborales y de vida de los trabajadores del textil.

 

En Inditex, Félix Poza Peña es el director de responsabilidad social corporativa. El líder del comercio mundial de moda cuenta con una estrategia que abarca todos los ámbitos de la cadena de producción y de distribución, desde la seguridad de los productos a la relación con los proveedores hasta la inversión en programas sociales concretos.

 

Uno de los pilares de la política de RSC del grupo gallego es el Acuerdo Marco que mantiene con los sindicatos y que, entre otras cuestiones, permite la entrada de los representantes de los trabajadores a todos los centros de producción que la compañía tiene en el mundo.

 

En el caso de H&M, el principal competidor de Inditex, su política de RSC se centra en dos líneas de trabajo: en una cadena de valor respetuosa con el medio ambiente orientada a las compras de algodón orgánico y a una gestión más sostenible del agua, y a un aprovisionamiento afín a los derechos de los trabajadores.

 

Al frente de la responsabilidad social corporativa en H&M está Helena Helmersson. La directiva, que ocupa el cargo desde 2010, lleva gran parte de su trayectoria profesional involucrada con el gigante sueco de la distribución. En sus propósitos para 2018, la empresa se ha marcado lograr que alrededor de 850.000 obreros que trabajan para sus proveedores estratégicos cobren un salario justo, es decir, que les cubra sus necesidades básicas.

 

En la estadounidense Gap, el departamento de responsabilidad social corporativa está liderado por Bobbi Silten, que también preside la Gap Foundation. Silten está bajo la dirección de la responsable de recursos humanos de la compañía, que reporta directamente al consejero delegado, Glenn Murphy. El departamento de RSC de la compañía cuenta con 82 trabajadores.

 

La estrategia de Gap en este área se centra en cuatro líneas: el medio ambiente, con políticas orientadas al uso de energías renovables, la reducción de residuos y de consumo de energía; en acciones sociales para el desarrollo económico de comunidades específicas; en programas para la mejora profesional de las trabajadoras de sus centros de producción en Asia, y en promover actividades de voluntariado entre sus empleados.

 

Fast Retailing, por su parte, tiene al frente de su departamento de RSC a Ueda, una directiva que tomó las riendas de esta área en 2005 procedente del ámbito de la consultoría. La ejecutiva pilota una estrategia orientada a la colaboración con ONGs para donaciones en iniciativas de ayuda humanitaria. La empresa también elabora programas de recogida de ropa usada.

 

Por último, una de las empresas que más ha acelerado en RSC ha sido Bestseller. El grupo danés incorporó hace dos años a Katrine Milman, una experta en este ámbito, que ha sido responsable de elaborar la primera estrategia en RSC de la compañía. Antes de dar el salto a Bestseller, la directiva había sido consultora medioamiental y responsable en RSC en unos grandes almacenes locales.

 

Bestseller ha trazado un plan en RSC que trata de abarcar todos los ámbitos de la materia, desde la gestión de la cadena de aprovisionamiento, los salarios de los trabajadores, acciones en las comunidades donde produce o cuidado del medioambiente, entre otros.