Back Stage

Las críticas no tumban a Lindsay Lohan

26 nov 2009 - 00:00

La actriz norteamericana Lindsay Lohan renace, una vez más, de sus cenizas. La firma francesa de moda Emanuel Ungaro ha confirmado a Lohan como asesora creativa de la firma haciendo oidos sordos al alud de críticas que recibió la colección que presentó, junto a Estrella Archs, el pasado octubre en París. Según aclaró el consejero delegado de la marca, Mounir Moufarrige, la actriz seguirá en la casa de moda. "Sí, ella tiene un trabajo que tiene que cumplir", zanjó. A pesar de la buena acogida mediática que tuvo el desfile, que suponía el debut de Archs con la firma francesa, las críticas de los expertos fueron demoledoras. Nadie hizo halagos a la presentación de la colección, inundada de mini vestidos, de colores chillones, cubre pezones y otras prendas más propias del mundo hollywoodiense en el que vive la actriz.Moufarrige confirmó que las ventas de la colección, bajo el asesoramiento de Lohan, no han sido las esperadas, pero que también creen que mejorarán gracias a los pedidos de algunas tiendas de distintos puntos del planeta, entre ellos las tiendas Harrods de Londres o los almacenes Bloomingdales de Nueva York. Mientras llegan los pedidos, la firma se aferra al futuro impulso comercial que debería generar la actriz en sus cuentas, ya que cuando desembarcó en la marca se vendió como una estrategia para atraer al público más joven. Pero la decisión del consejero delegado de la casa de moda es inapelable. La directora creativa de la firma mostró una media sonrisa tras finalizar su presentación en París en octubre y ha aguantado estoicamente las críticas que desde entonces le llueven asegurando en alguna ocasión que el fichaje de Lohan no tiene nada que ver con ella y que es una decisión de la marca. Casi del mismo modo se ha expresado desde entonces el fundador, Emanuel Ungaro, que dijo que la participación de la actriz había sido un "desastre". "Estoy furioso y no puedo hacer nada para remediarlo", aseguró el modisto. Ungaro se apresuró poco después del desfile parisino a desmarcarse de la firma y reiteró que no tiene contacto con la marca desde que salió de la misma en 2005, fecha en que la compró Asim Adbullah, un empresario norteamericano.