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Juan Carlos Martínez (IE): “El proteccionismo pasará, pero la globalización ya no tiene vuelta atrás”

El economista asegura que el escenario global apunta a que el mundo se enfrenta a una ralentización, pero no necesariamente a una nueva crisis mundial.

María Bertero

28 mar 2019 - 04:45

Juan Carlos Martínez (IE): “El proteccionismo pasará, pero la globalización ya no tiene vuelta atrás”

 

 

Juan Carlos Martínez Lázaro es licenciado en Económicas por la Universidad Autónoma de Madrid y profesor del área de economía de IE Business School. Martínez ha estado vinculado al área académica como director del Departamento de Publicaciones, de Planificación y Operaciones, director adjunto de los Programas MBA y Executive MBA y subdirector del Departamento de Admisiones de la escuela de negocios. El economista asegura que la guerra comercial y el Brexit tienen aún solución y que la globalización es un proceso irreversible. 

 

Pregunta: El mundo desacelera, ¿debería tener miedo la moda?

Respuesta: Todavía es muy apresurado para alarmarse. La desaceleración está impactando más al sector exterior de la economía y no tanto al consumo, por ahora. Pero si la recesión se confirma y no es sólo una desaceleración, evidentemente la moda se verá afectada, igual que el resto de los sectores que dependen del consumo.

 

P.: ¿Se avecina una nueva crisis global?

P.: De momento todo indica que se trata más de una desaceleración que de una recesión. Ahora mismo no parece que vaya a haber una crisis, pero sí una corrección temporal de los tiempos, también depende del país y del mercado que analicemos.

 

P.: Los mercados maduros desaceleran y los emergentes no crecen al ritmo esperado, ¿dónde le aconsejaría ir a un empresario?

R.: No es cuestión de ver qué mercado va a crecer más, sino teniendo en cuenta lo que vende ese empresario, qué territorio va a tener el desarrollo adecuado para sacar rentabilidad. La salida de la recesión de 2008 ha dejado importante cicatrices en mercados maduros, especialmente en Europa. Los ciclos importantes de crecimiento a los que estábamos acostumbrados ya no volverán. En los mercados emergentes, en cambio, hay de todo. Hay países en Latinoamérica que tendrán crecimientos importantes este año, vinculados a la recuperación de algunas economías, mientras que hay otros países que les costará más seguirle el ritmo al resto. Para Europa va a ser un año más difícil, quizás no tanto para España, y para algunos países emergentes 2019 puede ser un año de recuperación.

 

 

 

 

P.: En Latinoamérica, ¿el mayor riesgo es la incertidumbre política?

R.: No debería serlo. Sí que es verdad que los procesos electorales paralizan más la actividad que en otros mercados, pero no es tanto un factor de riesgo como lo puede ser que quien salga elegido aplique políticas populistas o políticas macroeconómicas sin sentido. Los populismos que pueden gobernar en algunos países de Latinoamérica entorpecen el crecimiento de la región, pero el mayor riesgo viene del entorno económico y no político. El precio de las materias es a lo que más debe temer Latinoamérica, es lo que condiciona la evolución de las principales economías de la región.

 

P.: ¿Tiene vuelta atrás la globalización? ¿Vamos a un mundo con más fronteras?

R.: La globalización puede experimentar cierta ralentización, pero no cabe la menor duda de que va a seguir creciendo y desarrollándose. Al final, Trump pasará y la globalización quedará. Las relaciones económicas son cada vez más estrechas entre los distintos países, las cadenas de producción son cada vez más globales.

 

P.: ¿Fenómenos como el Brexit o la guerra comercial tendrán el alcance que se prevé?

R.: Sí, sin duda. Pero lo cierto es que ambos procesos están aún en vías de solución. Estados Unidos y China están negociando un acuerdo que desactive la guerra comercial, mientras que el Brexit ha vuelto a pedir una prórroga para evitar una situación que sería catastrófica para toda Europa. Preveo que estos dos escenarios se van a desatascar y dejarán de ser el freno que están suponiendo para la economía global.

 

 

 

 

P.: Una empresa que no esté en estos territorios, ¿tendría que estar preocupada por esta situación?

R.: Sí, porque las consecuencias que puedan generar tanto el Brexit como la guerra comercial podría ser muy grande para algunos países. El primero afectará de manera bastante directa a España, Francia o Alemania, por los fuertes vínculos comerciales que se tiene con Reino Unido. La guerra comercial entre Estados Unidos y China también afecta más a países de Latinoamérica que están siendo abastecidos por China, que pasará a exportar mucho menos si se concreta el bloqueo con Estados Unidos. En definitiva, la guerra comercial afectará a todo el ámbito empresarial, estén a o no en China o Estados Unidos.

 

P.: ¿Qué otros factores ponen en riesgo la economía mundial?

R.: Lo que ahora pone en riesgo la economía global es hay algunos países en que están en nivel de maduración más maduro de lo previsto, entonces tienen a desacelerar. Estados Unidos ha tenido un crecimiento récord y es lógico que este año baje el ritmo. Esta desaceleración se verá más en el primer semestre de 2019, pero si finalmente el Brexit se encauza y la guerra comercial se desactiva, en 2020 ya veremos mejores crecimientos de las principales economías del mundo.

 

 

 

 

P.: ¿África puede ser un mercado de futuro?

R.: Nichos de negocio hay en todos lados, pero no podemos aún hablar de África como mercado de futuro. Hay algunos países del continente que han tenido un desarrollo considerable en los últimos años, pero no están generando los ritmos de expansión que se esperaban. Hay regiones como África subsahariana que continúan siendo muy dependientes de las materias primas y tienen una inestabilidad política aguda. Sin embargo, es real que por el tamaño de mercado y las condiciones demográficas puede ser un mercado de consumo interesante, pero aún vamos a seguir encontrando riesgos políticos, económicos y sociales en varios de los países africanos. El flujo de migrantes continuo que llega a Europa de estos territorios explica también la dificultad que atraviesa aún África.

 

P.: ¿Viviremos en un mundo en que Estados Unidos no tenga tanta hegemonía y sea más popular lo chino que lo americano?

R.: China ha tenido un desarrollo económico importante, pero la economía estadounidense es casi el doble que el del país asiático, además de la superioridad tecnológica que hay en Norteamérica. Hay una cuestión muy importante, más allá de la económica, que sigue concentrando Estados Unidos y es el poder cultural, mediático y social y mientras los tenga, va a ser muy complicado que China le pueda arrebatar el puesto. No sé me ocurre ningún otro país que pueda ganarle a Estados Unidos.