Javier Chércoles asciende en la matriz de Primark con un proyecto corporativo para AB Foods

Javier Chércoles, en el programa 'Valor Afegit' de 'TV3' el pasado marzo.

El que fuera director de responsabilidad social corporativa de Inditex asciende en Primark. Javier Chércoles, que en 2013 se incorporó a Primark en plena crisis por el derrumbe del edificio Rana Plaza de la capital de Bangladesh, se incorpora ahora al equipo directivo de la matriz de la cadena irlandesa de moda low cost. Chércoles se ha puesto al frente de un proyecto corporativo de responsabilidad social corporativa del grupo británico Associated British Foods.

Chércoles, que pasa gran parte de su tiempo en Daca (donde dirige la unidad de gestión de crisis de la Dhaka University), ha sido nombrado director de The Simon Project, que desarrolla para Associated British Foods.

Este proyecto, que se presentará el próximo julio en España, pretende calcular “la proporción de incidentes /accidentes de trabajo en el sector de prendas de vestir confeccionadas de Bangladesh”.

Aunque se trate de un trabajo corporativo, su impacto corresponderá principalmente a Primark, el único negocio de retail del grupo británico. Chércoles comenzó a colaborar en mayo de 2013 con Primark, para quien desarrollo y dirigió el Savar Project, “un modelo de seguro corporativo para calcular la compensación en las secuelas de la catástrofe Rana Plaza”.

Primark fue una de las empresa que más perjudicada salió de la catástrofe de Rana Plaza, al tiempo que ha sido una de las que ha mostrado un mayor grado de implicación. En su propia página web, Primark reconoce que una de las plantas de Rana Plaza producía sus prendas. La empresa ha sido una de las que ha aportado una mayor cantidad, 14 millones de dólares (13 millones de euros), para compensar a las víctimas del Rana Plaza.

Chércoles fue el encargado de confeccionar el Código Ético Interno de Conducta de Inditex, que regula, entre otras cuestiones, el funcionamiento de las fábricas con que trabaja el grupo.

El ex directivo de Inditex, que ya había trabajado en Bangladesh con anterioridad (en concreto para el grupo gallego), abandonó la empresa presidida por Pablo Isla a finales de 2010. Chércoles percibió una indemnización de 1,57 millones de euros.