Back Stage

El Mapa de la Moda 2019 (VIII): los colosos de la moda infantil

La caída de Gymboree generó varios cambios en el ránking mundial de uno de los sectores más fragmentados del negocio de la moda.

María Bertero

18 jun 2019 - 04:47

El Mapa de la Moda 2019 (VII): Los ‘ases’ globales de la perfumería

 

 

En un contexto de cambios acelerados, incertidumbre y transformación radical del sector, ni si quiera los grandes tienen su lugar asegurado en el olimpo de la moda. Por octavo año consecutivo, Modaes.es vuelve a realizar la serie El Mapa de la Moda, que realiza un recorrido por los principales operadores del sector y su evolución durante el último ejercicio.

 

¿Quién lidera el negocio de la moda infantil? ¿Quién pierde posiciones en los grandes almacenes? ¿Se mantiene el top 3 de la gran distribución? 

 

Patrocinado por Mixer&Pack, El Mapa de la Moda es un documento de consulta para los empresarios, directivos y profesionales del negocio de la moda y de sus sectores auxiliares. Cada capítulo figurará en Modaes.es como un artículo de análisis, para más tarde pasar a formar parte de un Dossier de consulta disponible en Modaes.es.

 

 

 

Otro año de cambio de posiciones entre los mayores grupos de moda infantil del mundo. Igual que pasó con el calzado, el Apocalipsis retail se cobró también una víctima de la ropa para niños el último año, con la liquidación de Gymboree. La empresa estadounidense, que ocupó la tercera posición en 2018, salió este año del ránking de las mayores empresas de moda infantil del mundo. Sin embargo, Gap se quedó con su marca Janie and Jack, mientras que The Children’s Place pagaría 76 millones de dólares por los derechos asociados de Gymboree y la firma Crazy 8. 

 

Esta vez, en la segunda posición se ubicó por primera vez la china Semir, que compró el pasado octubre la francesa Kidiliz. La empresa asiática es un gigante de 3.600 millones de euros y concentra el grueso de su negocio en su mercado local, pero ahora va a por Europa tras la compra de ex Grupe Zannier.

 

Semir destronó a The Children’s Place, que cayó este año un puesto, cerrando el top 3 de las mayores empresas de moda infantil del mundo. El sector, uno de los más fragmentados del negocio de la moda, sigue liderado por Carter’s, con amplia diferencia entre competidores como Mothercare o Petit Bateau, que destronó este año a la española Mayoral.

 

En 2018, los principales grupos de moda infantil pusieron en marcha distintas estrategias para hacer frente a la crisis que atraviesa el sector por la caída de la tasa de natalidad en varios mercados europeos. Innovar en las tiendas físicas y acelerar la estrategia omnicanal han sido los comunes denominadores de las diez mayores compañías de moda infantil durante el último año.

 

 

 

 

Carter’s, el titán que sigue aumentando la brecha con sus rivales

Carter’s vuelve a ser el mayor grupo de moda infantil del mundo. La empresa estadounidense, que cuenta con una decena de marcas en su cartera, es una de las pocas compañías del sector que factura más de 3.000 millones de dólares. El grupo acumula una década con ventas al alza y un incremento de su beneficio por encima del 10%.

 

Sin embargo, Carter’s también ha sucumbido a los cambios del sector y se ha visto obligado a reordenar su negocio, especialmente su canal offline. En 2018, la compañía inició un plan a cinco años con el que contempla alcanzar los 4.000 millones de dólares de facturación y reducir su red comercial, especialmente en su mercado local. “No vemos necesidad de contar con más tiendas en Estados Unidos, sino mejores establecimientos en las mejores ubicaciones”, destacó Michael Casey, consejero delegado de Carter’s en su carta anual a los accionistas. La empresa también ha depositado su confianza en el canal online, que espera que sea el impulsor del crecimiento del grupo hasta 2023.

 

El nuevo plan de crecimiento de Carter’s estará basado en cinco pilares: el crecimiento de todos sus canales de distribución y del mercado internacional; una mayor participación de las ventas del grupo en las plataformas de ecommerce de Amazon, Skip Hop y en los mercados chino y mexicano; mejorar su inventario y sourcing; sacar provecho de sus gastos; y recomprar acciones.

En paralelo, el mayor grupo de moda infantil del mundo seguirá buscando compras. La empresa es dueña de ocho firmas, aunque el grueso de su negocio lo copan su cadena homónima y OshKosh. En cuanto a su expansión offline, la empresa estadounidense pronosticó un menor crecimiento de sus ventas en el canal wholesale de su mercado local.

A cierre del ejercicio 2018, Carter’s operaba con una red de 844 tiendas en Estados Unidos, 188 en Canadá, 44 en México y más de 17.000 puntos de venta en su mercado local. El grupo también tiene presencia en Latinoamérica, y China a través del comercio electrónico.

 

 

 

 

Semir, el titán chino que se quedó con la plata y Kidiliz

Zhejiang Semir Garment se coló este año en la segunda posición del listado. El grupo es un gigante en China, su mercado doméstico, y ahora enfocará su expansión en Europa, tras comprar el año pasado a la francesa Kidiliz. La compañía europea, séptima mayor empresa de moda infantil del mundo por cifra de negocio, selló el pasado octubre su venta a Semir, creando un nuevo gigante de la moda infantil y destronando a la estadounidense The Children’s Place.

 

Fundada a mediados de los años noventa, Semir catapultó su negocio en enero de 2002 cuando puso en marcha Balabala, su primer concepto de moda infantil que impulsó al grupo a convertirse en el mayor retailer del sector en China. La empresa ha ido engordando su cartera en los últimos años, con marcas especializadas en distintos segmentos etarios que abarcan desde recién nacidos, adolescentes y jóvenes.  

 

Semir abrió su primer establecimiento en 1997 en la ciudad de Wenzhou, donde actualmente tiene su sede. La compañía debutó en la bolsa de Shenzhen en 2011 y cuenta actualmente con una cartera de trece marcas. Con la compra de Kidiliz, Semir logrará entrar en el segmento premium de la moda infantil y avanzar posiciones en el mercado europeo. La compañía francesa opera con más de un millar de puntos de venta en todo el mundo y es dueña de marcas como Catimini, Z, 3Pommes o Absorba. Kidiliz, que seguía en manos de la familia Zannier, cerró el ejercicio 2017 con una cifra de negocio de 427 millones de euros.

 

El gigante chino también selló el año pasado una alianza con The Children’s Place para comercializar la marca estadounidense en China. La italiana Satabanda también forma parte de la cartera de Semir, así como Cocotree, enfocada a niños y preadolescentes de 7 a 16 años.

 

 

 

 

The Children’s Place, última fase de transformación

The Children’s Place cerró otro año en positivo y se consolidó esta vez como la tercera mayor empresa de moda infantil del mundo, debido a la salida de Gymboree del listado y la inclusión de Semir. El grupo estadounidense se encuentra en la fase final de su proceso de transformación digital, que empezó en 2015 y culminará este año.

 

Mejorar su estrategia omnicanal ha sido uno de los mayores retos para la compañía estadounidense. En el último año, The Children’s Place aceleró su transformación digital con la implementación de nuevas herramientas en su plataforma de ecommerce, centradas en mejorar la experiencia de compra. Desde el grupo aseguraron que ya están viendo los beneficios de estos cuatro años de transformación de su negocio.

 

Pero el plan de reestructuración de The Children’s Place no sólo implicó cambios en el canal digital. La compañía realizó mejoras en sus productos y puso en marcha una nueva estrategia con el fin de colocar al consumidor en el centro de su negocio. Para ello, The Children’s Place ejecutó un plan basado en reforzar su programa de fidelización e introducir un nuevo plan de crédito para sus clientes.  

 

Con la liquidación de Gymboree, The Children´s Place sacó la chequera y ofreció 76 millones de dólares por los derecho asociados de la marca homónima del grupo y su firma Crazy 8.

 

El proceso de transformación también implicó cambios en su parque comercial. La compañía basó su crecimiento global en la optimización de su red de tiendas, sacando el mayor provecho a todos los canales de distribución con los que opera. En este sentido, la empresa echó el cierre a 211 establecimientos desde 2013. El grupo estadounidense finalizó el ejercicio 2018 con 972 en su mercado local, Canadá y Puerto Rico, además de 272 puntos de venta bajo el formato franquicia en otros veinte mercados. En el último año, The Children’s Place se alió con Semir, el mayor retailer de moda infantil de China, con el que abrió trescientos puntos de venta. De cara al ejercicio 2018, el tercer mayor grupo de moda infantil del mundo prevé facturar 1.915 millones de dólares y sumar cuarenta puntos de venta.

 

 

 

ÏDKids Group

El grupo francés ÏDKids Group se vuelto a posicionar en la cuarta posición entre las mayores empresas de moda infantil del mundo. En el ejercicio 2018, ÏDKids se quedó a las puertas de los mil millones de euros, anotando una cifra de negocio de 928 millones de euros, un 7,8% más que en 2017.

 

El grupo ha llevado adelante un proceso de reorganización de la dirección de sus marcas, con el traslado de la gestión completa de todas las firmas a cada territorio en el que está presente. La empresa cuenta con una cartera de nueve marcas, entre las que se encuentra Xybul, que sólo vende juguetes.

 

En 2018, el grupo francés pisó el acelerador en retail con la apertura de 115 nuevos puntos de venta en distintos mercados. Una de las puntas de lanza de ÏDKids volvió a ser Okaïdi, su cadena estrella, con la que se expandió con fuerza en España. La empresa se marcó el objetivo de subir la persiana de diez nuevas tiendas en el país de Okaïdi y Jacadi.

Además, la cuarta mayor compañía de moda infantil del mundo fichó en 2018 un nuevo director para el mercado español, con el nombramiento de Sergi Brunet i Viñà. El ejecutivo trabajó anteriormente en Pimkie, Aki Bricolage y Decathlon.

 

A escala global, ÏDKids opera tanto con tiendas propias como con franquicias y puntos de venta en el canal multimarca. La compañía fundada en 1996 ha consolidado su nueva identidad, después de que en 2016 cambiara de ÏD Group a ÏDKids Group. 

 

 

 

 

Mothercare, otra reestructuración y más cierres

La británica Mothercare sigue sin encontrar el rumbo. A pesar de mantener la quinta posición entre los mayores grupos de moda infantil del mundo, la compañía cerró otro ejercicio con más recortes, cierres y despidos.

 

En junio de 2018, los acreedores del grupo británico dieron luz verde al plan de reestructuración de Mothercare, que incluía el cierre de sesenta tiendas en Reino Unido y captar 28 millones de libras a través de una refinanciación y la emisión de nuevas acciones. Un mes más tarde, el grupo levantó casi el 78% de los recursos solicitados, lo que le permitió completar la refinanciación de su deuda. Mothercare anunció entonces que los fondos captados se reinvertirán en el área digital y tecnológica.

 

La compañía se ha visto envuelta nuevamente en una serie de recortes y reestructuraciones internas. Entre los planes de reestructuración de la empresa de moda infantil se contempló también el despido de novecientos trabajadores, especialmente por el cierre de más de medio centenar de establecimientos en su mercado local. En paralelo, el grupo activó un plan para disminuir los alquiler de veinte de sus tiendas, ahorrando 19 millones de libras (21,5 millones de euros).

 

A finales de año, Mothercare anunció otros doscientos despidos en sus oficinas centrales, ubicadas en la ciudad británica de Watford. Tras el comunicado, David Wood renunció a su puesto de director general del grupo, cuyo consejero delegado continúa siendo Mark Newton-Jones. En paralelo, la compañía británica se marcó el objetivo de reducir los salarios de su consejo de administración, que pretende reducir un 25% en 2019.

 

En este contexto, Mothercare salió del Ftse100, el selectivo bursátil de referencia de la bolsa de Londres, compuesto por las 100 compañías de mayor capitalización bursátil del parqué británico.

 

 

 

 

Orchestra-Prémaman, nuevo consejero delegado y otra ampliación de capital

Orchestra-Prémaman sigue buscando su rumbo. La compañía francesa, sexta en el ránking de los mayores grupos de moda infantil del mundo, cerró otro ejercicio convulso, marcado por la salida de su consejero delegado, la ampliación de capital y la caída de las ventas en su mercado local.

 

En septiembre, Orchestra obtuvo luz verde para una nueva ampliación de capital. La compañía francesa había llegado a un acuerdo con las entidades financieras unos meses antes, para la obtención de un crédito sindicado de 130,9 millones de euros, una ampliación de la deuda por valor de 89,1 millones de euros, y la emisión de bonos por veinte millones de euros con vencimiento a 2020, y por ochenta millones de euros con vencimiento a 2021. El grupo francés terminó ejecutando una ampliación de capital por 28,6 millones de euros, con la emisión de 27,8 millones de nuevas acciones, a precio unitario de 1,03 euros cada una. Del total captado, Orchestra utilizará 19,5 millones de euros para refinanciar su deuda y el restante para obtener liquidez.

 

Pero unos meses después de la ampliación de capital, la compañía tuvo que volver a virar el rumbo tras la salida de Thomas Hamelle, consejero delegado del grupo de moda infantil desde diciembre de 2016. En sustitución, Orchestra fichó a Mathieu Hamelle para pilotar la empresa, quien trabajó para grupos como Wecome, Groupe Beamanoir y Kookai.

 

Sumado a esto, la compañía cerró un mal año en términos económicos. Las ventas de Orchestra se contrajeron un 6,8% en 2018, hasta 570,8 millones de euros. El grupo atribuyó la caída la “difícil” situación de la economía mundial, pero especialmente a la francesa, donde el consumo registró su peor primer semestre de los últimos cinco años. La empresa también destacó sobre el efecto negativo de los chalecos amarillos en Francia en las ventas de Orchestra durante la segunda quincena de noviembre y todo diciembre.

 

Petit Bateau, expansión internacional con un siglo de historia

Otra francesa que se posiciona entre los mayores grupos de moda infantil. Petit Bateau ha sido incluida este año en el ránking mundial, con una facturación de cuatrocientos millones de euros, superando así a la española Mayoral. La empresa, propiedad de Grupo Rocher desde finales de la década de los ochenta, cerró un año particular, marcado por la celebración de su centenario.

 

Si bien los orígenes de la marca se remontan a 1893, Petit Bateau echó a andar en 1918, de la mano de los hermanos André, Xavier y Étienne Valton, herederos de la empresa de tejido Valton que revolucionó la moda íntima con la creación de las primeras bragas. Tras varias décadas especializándose en moda íntima y básicos, Petit Bateau se metió de lleno en el negocio de la moda infantil a principios de la década de los años noventa, unos años después de pasar a manos de Grupo Rocher, propietario también de Yves Rocher. El conglomerado francés rescató a Petit Bateau de la liquidación y la catapultó hasta convertirse en el sexto mayor grupo de moda íntima del mundo.

 

En el último año, la compañía francesa ha acelerado su expansión internacional. Tras aliarse con Li&Fung en China en 2016, Petit Bateau elevó su apuesta por el gigante asiático, marcándose el objetivo de contar con sesenta tiendas en el país para principios de 2019. El grupo también reordenó su negocio en España con el nombramiento de Max Buges como director de la filial de la empresa en el país. Sin embargo, Buges fue relevado el pasado abril por Rémi Vernay, quien era hasta entonces responsable del área financiera de Petit Bateau en España.

 

La empresa de moda infantil también desarrolló una nueva imagen de marca. Durante el último ejercicio, Petit Bateau comenzó a remodelar varios de sus establecimientos en todo el mundo con un nuevo concepto de tienda, que opera bajo el formato Plug and Play, con el que la marca pretende plasmar el espíritu de libertad y creatividad de los niños.

 

 

 

 

Mayoral, nueva marca e imagen corporativa

En 2018, Mayoral se reforzó en varios frentes. La compañía española aceleró en el extranjero, lanzó una nueva marca y puso en marcha de un nuevo centro de distribución. El grupo cerró el ejercicio con una cifra de negocio de 350 millones de euros, lo que lo coloca en la octava posición del ránking de las mayores empresas de moda infantil del mundo.

 

Los mercados extranjeros han sido una de las prioridades de Mayoral en el último año. La empresa abrió filiales en Bulgaria, Perú y Reino Unido, con las que alcanzó 17 subsidiarias en todo el mundo. Las ventas internacionales copan casi el 20% de la facturación global de la compañía española.

 

La expansión del grupo también supuso el lanzamiento de una nueva marca, para la que el grupo creó todo un nuevo equipo de diseño. En marzo, Mayoral anunció la creación de Abel&Lula, firma de posicionamiento premium y pensada para ocasiones especiales. La comercialización de la enseña comenzó a través del canal multimarca y online en varios países de Europa y en Estados Unidos. En paralelo a la creación de Abel&Lula, Mayoral puso en marcha una nueva imagen corporativa y cambió su logo, como han hecho otros gigantes del sector en el último año. La principal novedad del nuevo logotipo, diseñado por la agencia de branding Summa, es la incorporación de una nube en la letra o, que se convertirá en un icono que figurará en todas las prendas, sustituyendo a la tradicional m de color naranja.

 

En el último año, el grupo malagueño de moda infantil también apuntaló su red logística para dar servicio a los más de doscientos puntos de venta que tiene en todo el mundo. Mayoral ha invertido más de setenta millones de euros para abrir un centro de distribución en Málaga, en el mismo inmueble que albergaba la antigua empresa textil Intelhorce. El almacén entrará en funcionamiento a mediados de 2019.

 

 

 

 

CWF, crecimiento a golpe de nuevas licencias

Otra francesa que se cuela entre los diez mayores grupos de moda infantil del mundo. Children’s  Worldwide Fashion (CWF) cerró el último ejercicio con una facturación de más de 160 millones de euros, lo que la posicionó como la novena mayor empresa del sector por cifra de negocio.

 

El mercado español volvió a ser uno de los focos de expansión para la compañía, que inició hace un par de años una estrategia de reorganzación en el país. CWF, especializada en la licencia de marcas de moda infantil, introdujo Givenchy en España a través de El Corte Inglés, uno de sus socios estratégicos en el extranjero.

 

En paralelo, el grupo francés puso en marcha su plataforma de ecommerce en el país, en la que distribuye toda su cartera de marcas. La presencia física de CWF en España se extiende actualmente a sus conceptos multimarca Kids Around y Billie’s Market.

 

El negocio de CWF en el mercado ibérico está pilotado por Manuel Ildelfonso, al frente del mercado portugués y español. Además, a principios de 2018, la compañía francesa colocó a David Monné como responsables de desarrollo en la Península Ibérica. El ejecutivo, que trabajó para Luxottica, será también encargado de implementar una nueva estrategia en el mercado español.

 

 

 

 

Zippy, nueva identidad y reposicionamiento de marca

La portuguesa Zippy, propiedad del gigante Sonae, inició en 2018 un proceso de transformación y reposicionamiento de su marca. Si en 2017 la novena mayor empresa de moda infantil del mundo había apostado por la sostenibilidad, en el último ejercicio, la compañía dio un salto adelante con una nueva imagen y la renovación de su producto, al mismo tiempo en que aceleró su expansión en el extranjero.

 

A mediados de año, Zippy lanzó una nueva imagen corporativa e identidad visual en todos sus canales. La compañía portuguesa se basó en el lema We Go Together para desarrollar su nueva imagen y reposicionar la marca, colocándola más cerca de los padres a los niños a la que va dirigida. El cambio estuvo acompañado de una nueva línea visual, ideada por Filipa Bello, directora creativa de Zippy, que incursionó con formas geométricas, haciendo referencia a los juguetes de los niños.

 

En noviembre, Zippy desembarcó en Brasil, con la apertura de dos primeros establecimientos, ubicados en São Paulo. Los planes de la cadena de moda infantil de Sonae pasan por abrir otras cuatro tiendas en el mercado brasileño hasta 2022. Latinoamérica ha quedado apartada de la expansión internacional de Zippy, que concentra su presencia sólo en República Dominicana y Venezuela. La empresa saltó al retail en 2004 y opera en más de veinte mercados.

 

Sonae, matriz de Zippy y de otras marcas de moda como Losan o Salsa, trasladó el año pasado las oficinas que tenía Madrid, mudándose a un edificio de 6.759 metros cuadrados de superficie y que cuenta con 110 plazas de garaje. El gigante portugués tiene previsto sacar a bolsa su negocio de retail, pero excluirá su división de moda, que contempla a las firmas Zippy, Losan, Mö, Berg, Sport Zone y Salsa.

 

Dicho segmento del negocio del grupo portugués, denominado Sports&Fashion, cerró el ejercicio 2018 con una cifra de negocio de 369 millones de euros, lo que supuso un crecimiento interanual del 1,9%. La división de moda de Sonae está presidida por Luís Reis.