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El ‘made in France’ busca su hueco en España

S.García

13 jul 2012 - 04:52

Francia es uno de los países con una mayor tradición en la industria de la moda. Con un sector formado por marcas históricas como Chanel, Dior o Givenchy, los nuevos diseñadores galos tienen que buscar fórmulas para poder darse a conocer en un mercado que, según ellos mismos dicen, “tiene miedo de arriesgar con creadores jóvenes”.

 

Una de las opciones que barajan en primer lugar es salir al exterior. Países como Bélgica, Reino Unido o España son su primera elección. “En las tiendas francesas no quieren arriesgar y en mercados como el belga o el español se interesan por nosotros mucho más”, explica Aurélie Lecorneur, fundadora de la enseña de marroquinería Juni.

 

Lecorneur admite que el camino es largo pero más sencillo cuando vuelves a tu mercado local tras tener éxito a nivel internacional. Por eso, la fundadora de Juni decidió empezar por el extranjero. Bélgica, Italia, Reino Unido y España han sido sus primeras cuatro paradas.

 

En este último, la creadora prevé encontrar agentes comerciales y tiendas multimarca en las que pueda vender sus productos. De momento, Juni cuenta con presencia en siete espacios multimarca en Francia y en su propia tienda online.

 

En el mismo sentido, Nicolas Nesson explica que los mercados exteriores son una gran opción para los diseñadores jóvenes. “Las tiendas galas no quieren asumir ningún tipo de riesgo y, por eso, no confían en poner a marcas nuevas en su espacio”, sostiene. “En Francia todas las tiendas tienen el mismo producto, no hay variedad de ningún tipo”, añade.

 

Nesson es uno de los responsables de Maisons de Mode, una asociación que aglutina a más de una veintena de diseñadores jóvenes. La iniciativa, impulsada por la política gala Martine Aubry, asesora a los creadores en materias tan dispares como el plan de negocio o la imagen de marca.

 

La asociación ha venido a España con tres de sus diseñadores, para los que pretende encontrar agentes comerciales y tiendas multimarca en las que encaje el producto. “En España se arriesga más que en Francia y confían en los nuevos creadores, por eso pienso que los diseñadores que presentamos tienen posibilidades”, subraya Nesson.

 

En el caso de Les Néréides, la enseña ya cuenta con presencia en España. La firma, especializada en joyería, cuenta con diversos puntos de venta a nivel internacional. “En el mercado español tenemos ocho clientes pero queremos ampliar más nuestra presencia aquí”, explican desde la enseña.

 

Este no es el caso de Ubu, especializada en bisutería y accesorios de moda. La marca quiere entrar en el mercado español para poder crecer a nivel internacional. Calaveras, cruces y colores como el rojo son las señas de identidad de esta firma francesa que cree que España es un potente cliente al que vender sus productos.

 

 Estas marcas son sólo algunas de las que estuvieron ayer en Barcelona en la primera edición de French Touch, un showroom dedicado a enseñas de moda y accesorios organizado por Ubifrance, agencia francesa para la internacionalización de empresas.