De Irving Penn a Mario Testino: la moda en negativos

Dicen que una imagen vale más que mil palabras, y si existe un arte que ha llevado la moda a otro estrado es la fotografía. En este ámbito, Irving Penn, Richard Avedon o Mario Testino son algunos de los fotógrafos que han conseguido insuflar vida a la moda a través de sus objetivos fotográficos. Al repasar la trayectoria de los fotógrafos de moda más reconocidos aparece el nombre de Irving Penn. El artista, que convirtió la fotografía en blanco y negro en su sello personal, dejó huella de su talento en los grandes almacenes de lujo Saks Fifth Avenue antes de fichar para la revista Vogue, que publicó su primera fotografía en portada en 1943. La cámara de Penn inmortalizó a personalidades como Truman Capote, Colette o Miles Davis.

Por Vogue también pasó uno de los fotógrafos más relevantes de las últimas décadas: Richard Avedon. Con una técnica caracterizada por el movimiento, Avedon trabajó durante más de veinte años en Harper’s Bazaar antes de entrar en la redacción estadounidense de Vogue. Además de sus míticas instantáneas de moda, Avedon también recogió en sus negativos a los manifestantes contra la guerra de Vietnam o la caída del muro de Berlín. El interés de Avedon por el negocio de la moda procede del seno de su familia, pues su padre era propietario de una tienda y la familia de su madre, de una empresa de confección textil. 

 
Y de Estados Unidos a Latinoamérica. Otro de los que han marcado un hito en la  historia de la moda es Mario Testino. El fotógrafo, de origen peruano, se formó en Economía, Derecho y Relaciones Internacionales antes de mudarse a Reino Unido. Allí dio sus primeros pasos en el arte de la fotografía vendiendo portafolios a aspirantes a modelo por 25 libras y acabó por inmortalizar a personalidades como la princesa Diana de Gales. Testino ha sido galardonado con diferentes premios a lo largo de su carrera.  

Richard Avedon en su estudio

Otro de los fotógrafos preferidos por estas celebridades es Peter Lindbergh, cuyo objetivo ha retratado a top models como Naomi Campbell o Cindy Crawford. Del mismo modo que sus antecesores, Lindbergh dio fuerza a sus trabajos a través del blanco y negro y una composición muy sencilla. 

La moda también reserva un lugar para las mujeres, sobre todo para aquella que fotografió a John Lennon desnudo abrazando a Yoko Ono. Su autora fue Annie Leibovitz, que actualmente es una de las fotógrafas mejor pagadas del mundo y que ha recibido galardones como el Príncipe de Asturias de Comunicación y Humanidades. Y de la sencillez al surrealismo, Steven Meisel se ha ganado un sitio entre los fotógrafos más destacados, sobre todo por su capacidad de integrar las corrientes culturales en sus instantáneas.