Back Stage

De Alvarno y Azzaro a Ortiz y Lanvin, españoles en la cima del diseño internacional

S. García

17 jun 2013 - 04:38

El dúo Alvarno es la última entrada del diseño español en una empresa de moda internacional. Álvaro Castejón y Arnaud Maillard han sido designados como los nuevos responsables de la división creativa de la enseña Azzaro, tras la salida de Mathilde Castello Branco. Ellos son los últimos de una reducida lista de creadores españoles que han conseguido alcanzar la cima de la moda, liderando los departamentos de diseño de firmas internacionales.

 

Aunque el dúo ya había llegado a un acuerdo con Caramelo, la entrada en los juzgados y la presentación de un expediente de regulación de empleo (ERE) para despedir a más del 40% de la plantilla han hecho llevado a Maillard y Castejón a buscar alternativas.

 

Ambos diseñadores, afincados en Madrid, cuentan con una trayectoria internacional. Castejón ha formado parte de la plantilla de firmas como Alexander McQueen o Fendi y Maillard pasó quince años trabajando junto a Karl Lagerfeld. En 2009, el dúo fundó su propia marca, Alvarno, que han dirigido hasta ahora y de la que han presentado dos colecciones al año en Madrid.

 

“No es algo que ocurra a menudo, porque los grandes conglomerados que compran empresas de moda piensan más en los resultados a corto plazo y no apuestan por arriesgarse con nombres menos conocidos”, explica Inmaculada Urrea, socia fundadora de la consultora Sofoco Media. “Además, en la cantera de diseñadores españoles no hay ninguno con suficiente trayectoria y contactos para terminar en una compañía internacional”, añade.

 

En este sentido, la creadora española más prolífica ha sido Cristina Ortiz. La diseñadora fue la responsable de las colecciones de mujer de Lanvin hasta 2001, antes de que llegara Alber Elbaz y le diera la vuelta a la firma. Anteriormente, la diseñadora canaria estudió en París y formó parte de la enseña Max Mara, para más tarde convertirse en parte de la plantilla de Prada, donde fue mano derecha de Miuccia Prada en el diseño de las colecciones de mujer y, finalmente, pasar a ser la responsable del lanzamiento de la línea femenina de Brioni.

 

Tras abandonar Lanvin, Ortiz fichó por Salvatore Ferragamo, donde trabajó hasta 2009. Desde entonces, la diseñadora ha estado apartada de la primera línea de la industria.

 

La creadora catalana Estrella Archs ha sido otra de las diseñadoras que han alcanzado mayor fama en el negocio de la moda a nivel internacional. Archs, que estudió en la Central Saint Martins de Londres, trabajó en sus inicios en su propia línea, lanzada en 2007.

 

En dos años, Estrella Archs se convirtió en una diseñadora conocida y fue nombrada como máxima responsable de la división de diseño de Ungaro, como sustituta de Esteban Cortázar. Archs fue fichada con el objetivo de relanzar una enseña que no terminaba de cuajar en la industria. La diseñadora, que tuvo entre sus asesores a la celebrity Lindsay Lohan, abandonó la empresa sólo un año después de lanzar su primera colección, a pesar de que tenía un contrato de cuatro años.

 

Además de trabajar en Ungaro, Archs ha formado parte de la plantilla de otras firmas internacionales como Pucci, Cacharel, Prada o Nina Ricci, pero sobre todo dedicó su tiempo a la enseña que lleva su nombre y de la que presentó su última colección en 2011.

 

Otro de los ejemplos más recientes de diseñadores españoles que llegan a formar parte de la plantilla de enseñas como Valentino es Álvaro González. Especializado en creación de accesorios, González se ha labrado una carrera profesional en firmas como Loewe, Tod’s o Jimmy Choo, donde ocupó el cargo de director de diseño de accesorios. Su trabajo más reciente lo ha desarrollado en Stuart Weitzman, donde ha trabajo en la colección SW1, que ha abandonado para crear su propia línea de calzado y accesorios.