Brava Fabrics, camisas estampadas para seducir al capital

Ramón Barbero e Ivan Monells emprendieron con Brava Fabrics tras haberse conocido en un MBA de Esade y haber trabajado en un proyecto común. Los empresarios incurrieron en la industria de la moda por accidente: hasta 2015, eran ajenos al sector, aunque sí poseían nociones de ecommerce. Con una inversión inicial de 50.000 euros, los emprendedores se embarcaron en el proyecto de la venta de camisas estampadas a través de la Red.  “Ahora es algo muy extendido, pero entonces no lo era tanto”, argumentan. En la actualidad, Brava Fabrics se dedica a la producción de todo tipo de prendas con un componente sostenible. Todas las piezas se crean usando algodón sostenible, y la fabricación se realiza en instalaciones en España y Portugal. Los precios de los productos oscilan entre 38,90 euros y 99,90 euros.

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Multimarca, el invitado inesperado a la fiesta 

De sandías a flores, pasando por bicicletas y submarinos. Brava Fabrics nació hace seis años de la mano de sus fundadores, Ivan Monells y Ramón Barbero, como  empresa especializada en la producción de camisas estampadas para hombre. Esta start up barcelonesa ha recorrido un largo camino desde que empezó a dar sus primeros pasos. La empresa ha diversificado su negocio, entrando en el segmento de mujer, y ampliando su oferta con productos de íntimo, baño o abrigos. “De todo menos calzado”, resume Monells. El emprendedor y su socio empezaron su andadura en el sector de la moda casi por accidente. “No teníamos background, aunque sí conocimientos de negocios digitales, así que decidimos lanzar Brava porque había una serie de indicadores macro que indicaban que en España el ecommerce de moda masculina estaba creciendo mucho”, explica el empresario.

Brava Fabrics nació con la idea de vender a través de la Red, pero en poco tiempo este planteamiento evolucionó. “Nos dimos cuenta de que la moda se compraba en la calle”, apunta Barbero. Por ello, la start up viró en pro del brick, primero a través del canal multimarca y más tarde con la apertura de sus dos tiendas propias, una en Barcelona y otra en Madrid. La start up concentra el grueso de su facturación en el exterior: en el último año, el 92% de las ventas fueron de carácter internacional. Asimismo, y pese a la fuerte apuesta por el retail, la compañía continúa apoyándose especialmente en la Red, que el año pasado copó el 80% de la facturación, debido en buena parte al embate de la pandemia en el comercio físico.

Este año, Brava Fabrics ha sido una de las tres empresas de moda seleccionadas para incorporarse a Lanzadera, la aceleradora de start ups de Juan Roig, presidente de Mercadona. Monells y Barbero argumentan que Lanzadera “ha avalado nuestro plan de crecimiento”. Esta estrategia de expansión pasa por impulsar las ventas no menos de un 40% y no más de un 70% este año, en palabras de los fundadores. El año pasado, Brava Fabrics casi duplicó sus ventas, registrando una cifra de negocio de 3,5 millones de euros.