Acosta crece en el extranjero con el salto a Suiza y Japón y se apoya en El Corte Inglés en España

Acosta despega de nuevo. La histórica compañía española, en manos del grupo industrial Pytón desde 2011, ha impulsado su crecimiento en el mercado nacional a través de El Corte Inglés y ha retomado su expansión fuera de las fronteras nacionales con la entrada en Suiza y Japón, según ha explicado Aida Araujo, directora de operaciones de la compañía, a Modaes.es.

“Hasta ahora, habíamos estado en el extranjero de manera más bien puntual, pero la idea en estos dos nuevos mercados es estar presentes de forma permanente”, explica Araujo. La compañía opera en el extranjero a través de establecimientos multimarca.  

En el mercado español, el grupo ha reforzado su alianza con El Corte Inglés para impulsar su crecimiento a través de los grandes almacenes. Acosta abrirá antes de que acabe el año tres nuevos espacios en El Corte Inglés de Pozuelo (Madrid), Diagonal (Barcelona) y Alicante.

“Es un canal que está funcionando muy bien, y por eso seguiremos apostando por él para crecer”, dice Araujo. “Hemos abierto entrado en cuatro centros El Corte Inglés en un solo año, y el año que viene seguro que volveremos a abrir nuevos espacios”, asegura.

La compañía está presente en el grupo de grandes almacenes desde el año pasado, cuando abrió su primer corner en el centro de la Castellana, en Madrid. Desde entonces, ha puesto en marcha otros cinco espacios más en Pamplona, A Coruña, Valladolid y en los centros de Princesa (Madrid) y Francesc Macià (Barcelona).

La red de distribución de Acosta en España se completa con 25 clientes multimarca y tres tiendas propias repartidas por la Península: un flagship store en la calle Claudio Coello de Madrid y otros dos establecimientos en Valencia y Valladolid. El grupo descarta continuar creciendo a través de este canal por el momento.

“En esta nueva etapa se está yendo con pies de plomo, consolidando lo que ya tenemos antes de realizar nuevas aperturas”, explica Araujo, que lleva en la compañía desde 2006. Además de retomar la expansión internacional, el grupo también está volviendo a introducir categorías de producto que tenía en la época anterior, como la peletería o las gafas.

“En España, la consumidora, y especialmente la nuestra, que tiene a partir de 35 años, quiere entrar en una sola tienda y salir con el total look, en lugar de comprar cada pieza en un establecimiento distinto”, sostiene Araujo.

La compañía, que antes contaba con una fábrica propia, subcontrata ahora su producción a talleres en Madrid y Alicante, y algunos trabajan en exclusiva para Acosta. Durante los últimos años antes del cambio de manos, la producción se deslocalizó a Europa del Este, pero volver a impulsar la marca made in Spain fue una de las prioridades en la nueva etapa.

“Todo lo hacemos aquí, incluso las gafas, que se fabrican íntegramente en Madrid”, explica Araujo. “Además, procuramos que la casi todos los materiales sean nacionales”, dice la directiva.

Fundada por Cecilio Acosta, la enseña nació en Madrid en 1942 como un taller artesanal. La empresa, que extendió su producto por Europa y Asia, llegó a contar con treinta tiendas en España y dos fábricas propias, una para bolsos y otra para zapatos. Con todo, al llegar la crisis, las ventas de la compañía comenzaron a resentirse.

La empresa concedió una hipoteca sobre sus marcas en favor del grupo industrial Pytón, entonces uno de sus proveedores, para asegurar los pagos. Al no cumplirse los acuerdos de pagos, la marca se adjudicó judicialmente a Pytón en 2011.

Un año después, Acosta desapareció del mercado. Hace dos años, puso de nuevo en marcha la maquinaria y comenzó a conformar un nuevo equipo directivo. En 2014, la enseña colocó como consejero delegado a Manuel Velilla Barquero, profesor de la escuela de negocios Iese. La marca, que opera con la sociedad Camlann 537 AD, ha vuelto a fabricar en España, y ha externalizado su producción a talleres de Ubrique, Madrid y Alicante.